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El torero está obligado a crear arte delante del público

    La Escuela de Tauromaquia de Valencia (http://web01.dival.es/escuelataurina/01-historia-f.htm) ha clausurado el curso 2011 con un acto que tuvo lugar ayer por la tarde en la sala Alfons El Magnànim de la Beneficència. La mesa presidencial estuvo compuesta por el director de la Escuela, Manolo Carrión, el diputado de Asuntos Taurinos, Isidro Prieto, y dos invitados especiales, Andrés Amorós, profesor honorario y crítico taurino, e Ignacio Lloret, gerente de la plaza de toros de Valencia, que dictaron una conferencia sobre "La tauromaquia como disciplina artística".

    El director y torero valenciano, Manolo Carrión, se encargó de hacer previamente un reconocimiento del curso con una valoración "muy positiva", teniendo en cuenta que, "hemos toreado un número importante de novilladas. "Los alumnos han destacado haciendo gala de una calidad artística muy interesante y han triunfado en plazas importantes como la de Valencia, Castellón y Alicante". Con lo cual, "el balance no puede ser más que positivo y sobre todo esperanzador de cara al futuro más inmediato que es la próxima temporada", subrayó.

    Ponentes
    El crítico taurino del diario ABC con una trayectoria cultural de "mucho peso", según Manolo Carrión, Andrés Amorós explicó que "la tauromaquia puede considerarse una profesión para ellos (los alumnos) o puede ser un espectáculo para el público, pero también puede ser un arte porque busca la belleza y la emoción". Dentro de las peculiaridades que tiene la tauromaquia "es que se produce a fecha fija y a hora fija con un material que es el toro considerado un animal peligrosísimo".

    Amorós aconsejó a los alumnos que "hay que tener muchísima afición, ha de ser una auténtica pasión si se busca. Yo he conocido a muchos grandes toreros y para ellos ya no es el ganar dinero o la fama, lo suyo es una verdadera obsesión por alcanzar la perfección en su tarea". Además hizo hincapié en que "el torero está obligado a crear arte delante del público", por lo tanto, "el torero es un arte que tiene que ver con la escultura, la pintura, la música, la danza… es decir, es un arte mixto".

    Por otro lado, el gerente de la plaza de toros de Valencia y licenciado en Derecho, Ignacio Lloret, le dio un toque jurídico a la conferencia al afirmar que "el toreo es un producto cultural", y, por ello, "es un derecho a la cultura que debemos aprovechar para defender la cultura del toro".

    La Diputación, con los toros
    Manolo Carrión reconoció la importante labor que realiza con la fiesta de los toros la corporación provincial, presidida por Alfonso Rus, ya que, "es fundamental. Considero que el apoyo que recibe la Escuela de Tauromaquia por parte de la Diputación es absolutamente decisivo, sin ella los proyectos serían inviables prácticamente".

     

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