elperiodic.com
SELECCIONA IDIOMA
Valencià

Barx, Fortaleny, la Font d’En Carròs Massalfassar y Villanueva de Castellón delegan su gestión tributaria en la Diputación

  • Las Comunidades de Regantes la Unión Agrícola de Anna y la Acequia Común de Carlet también han encomendado a la institución provincial su recaudación tributaria

El Servicio de Gestión Tributaria (SGT) de la Diputación de Valencia ha recibido en el último año siete nuevas solicitudes de delegaciones en materia de gestión y recaudación de diversos impuestos y tasas municipales.

El diputado responsable del área, José Manuel Haro ha realizado un balance “muy positivo” del servicio que cuenta ya con más de 180 poblaciones adheridas y que convierte a la Diputación en “la primera entidad de recaudación de impuestos de la provincia de Valencia”.

Barx, Fortaleny, la Font d’En Carròs, Massalfassar y Villanueva de Castellón han delegado este año su gestión tributaria a la Diputación de Valencia. Además de estos municipios, también han encomendado a la institución provincial su recaudación ejecutiva las Comunidades de Regantes: la Unión Agrícola de Anna y la Acequia Común de Carlet.

Asimismo, un total de ocho municipios han ampliado entre marzo y abril la delegación de funciones que hasta el momento mantenían con la Institución en materia tributaria, siendo estas localidades; Castelló de Rugat, Chulilla, Higueruelas, La Pobla Llarga, Quartell, Caudete de las Fuentes, la Granja de la Costera y Benavites.

Haro: “El Servicio de Gestión Tributaria de la Diputación es una excelente fórmula a aplicar en momentos de crisis como el actual”

En cuanto a la ventajas del servicio, el diputado ha destacado que se trata de una “excelente fórmula a aplicar en momentos de crisis como el actual, ya que permite mejorar los ingresos municipales sin necesidad de incrementar la presión fiscal sobre el ciudadano, puesto que desde la Diputación se actualizan los padrones fiscales para que representen fielmente la realidad y conseguir así una recaudación eficiente”.

Asimismo, Haro ha incidido también en el ahorro que supone la delegación de funciones tributarias para las arcas municipales ya que constituye un “importante desahogo económico para los ayuntamientos, ya que evitan la renovación periódica de los medios informáticos destinados a la gestión y recaudación de tributos, al tiempo que prescinden también del gasto del personal dedicado a desarrollar tales competencias”.

 

Subir