Más de 100 familias se benefician del cheque bebé
Ha sido el proyecto social estrella del año y ha supuesto una inversión de 60.000 euros
El Ayuntamiento de El Puig de Santa Maria ha hecho balance de un año marcado por la crisis económica pero con una política centrada en el empleo y en los avances sociales. Uno de los proyectos más importantes a nivel social ha sido la puesta en marcha, por primera vez en la historia, del cheque-bebé, una ayuda de 600 euros por nacimiento a consumir exclusivamente en el comercio local. Más de 100 familias se han beneficiado de esta ambiciosa iniciativa que ha permitido, por un lado, ayudar a las familias y, por otro lado, reactivar la economía local. Bajo esa premisa, se han ejecutado distintas campañas comerciales para hacer más atractivo el comercio local y conseguir fidelizar a sus clientes. Durante el año, han sido de gran éxito las IV Jornadas Gastronómicas, la I Ruta de la Tapa, la campaña “Rasca y gana”, etc.
La recreación histórica de noviembre, que consiguió congregar a cerca de 30.000 visitantes en tan sólo un fin de semana, supuso también un soplo de aire fresco para la empresa local; muchos bares y restaurantes tuvieron que colgar, en más de una ocasión, el cartel de “todo lleno”. "Estos eventos son necesarios en un momento como este y estamos muy contentos, ha sido una inyección de ilusión que necesitábamos", comentó uno de los empresarios locales.
También este año ha sido el del estreno de las nuevas instalaciones deportivas, en concreto de la remodelación del pabellón y la adecuación de sus accesos que han supuesto una inversión total de 1.264.662 euros con fondos provenientes del gobierno central y el autonómico, respectivamente.
Todos estos proyectos se han podido realizar, además de por la entrada de subvenciones, por el ajuste en las partidas menos básicas. En este sentido, las fiestas navideñas, por ejemplo, han supuesto un gasto mínimo y han seguido la línea de contención que arrancó el año pasado, donde el ahorro alcanzó los 35.000 euros. Las fiestas patronales, que se celebran en septiembre, supusieron un ahorro del 50 % respecto a años anteriores gracias al gran esfuerzo realizado para conseguir más subvenciones, patrocinios privados y negociar a la baja las distintas actuaciones.
Todo esto, mientras el número de visitantes al municipio sigue creciendo y se sitúa entorno a 50.000 turistas, gracias a la labor del consistorio de poner en bandeja al visitante todo el potencial turístico del municipio.
2013: Austeridad y crecimiento
Ahora se está trabajando en la elaboración de unos presupuestos austeros y sociales “conteniendo el gasto con el fin de equilibrar las cuentas sin que los vecinos vean mermada su calidad de vida, sobre todo aquellas familias que más lo necesiten”.
Entre otros proyectos, 2013 será también el año de la puesta en marcha de la pasarela peatonal ciclista que una casco urbano y playa y que es fruto de una reivindicación histórica de los vecinos.
2013 será el año en el que se obtenga, en la playa, la certificación del sistema de gestión medioambiental ISO 14.001, antesala de la bandera azul y de la Q de Calidad, que supondrá que la costa cumpla con la ley medioambiental y la calidad de los servicios.
“Esperamos, ante todo, que el nuevo año sea el de la recuperación y el crecimiento”, ha dicho el primer edil, Jose Miguel Tolosa Peiró.
