Festeros de todas las edades dispuestos a organizar las fiestas populares y patronales
En la fría noche del 21 de febrero se celebró la presentación de invierno de los festeros. El acto comenzó con la recogida de los infantiles en la puerta de la parroquia de Santa Marta y, acompañados de los jóvenes, casados y tercera edad, recorrieron las avenidas Font de Mora, Valencia y la calle San Juan hasta la iglesia de los Santos Juanes.
Pese al frío, la del sábado 21 de febrero fue una tarde-noche particularmente activa. Primero fueron los falleros, con su pasacalle y la crida desde el balcón del ayuntamiento; tras ellos, los festeros; y en una noche muy, muy larga, las nit d’albaes de las fallas. Por lo que hubo que coordinar horarios para poder llegar a todos.
Los festeros jóvenes esperaron en la calle Sant Pere a que finalizara el castillo tras la crida, para iniciar la subida hasta Santa Marta, donde aguardaban los más pequeños en compañía de sus familiares.
Una vez juntos, recorrieron el casco urbano en animado pasacalle, porque el frío no invitaba a quedarse parado en ningún momento. Ya en los Santos Juanes, los primeros en desfilar fueron los festeros infantiles, ante el público que llenaba la parroquia.
Luego llegó el turno de los casados, los de la tercera edad y los jóvenes... todos con ese aire propio de pasarela, a lo que contribuía un vestuario adecuado para la ocasión, la presencia de numerosos fotógrafos y los aplausos continuos de los asistentes.
Sin duda, el momento más esperado en la presentación de festeros era la aparición de los festeros jóvenes de este año, que serán los encargados de organizar las fiestas de septiembre: doce parejas de jóvenes que ya saben lo que es repartir lotería, vender cartones, buscar publicidad, contratar espectáculos y acudir a actos de sociedad.
En septiembre, además, serán la cara visible de las fiestas patronales y populares.
Una vez los festeros de todas las edades estaban en el altar, fue el turno de los parlamentos: primero, los propios festeros jóvenes; después, el presidente de la Cofradía de la Virgen al Pie de la Cruz; tercera, la alcaldesa Merche Sanchis; y para finalizar, el sacerdote Ismael Ortiz.
El Himno a la Patrona puso el punto final a la ceremonia festiva y religiosa en la parroquia.
Y tras las fotos de rigor, mientras los festeros se preparaban para una cena oficial (que acabó de madrugada en la playa de Canet), autoridades y gran parte del público se trasladaban nuevamente al ayuntamiento, para continuar la fiesta con la nit d’albaes fallera.
