Los senderistas recorren el noroeste de la Sierra Espadán
En esta ocasión, el domingo 5 de diciembre, los componentes del Grupo de Senderismo Puçol visitaron Higueras, localidad enclavada al Noroeste del Parque Natural de Sierra Espadán, con un recorrido que transcurre entre los términos de Montán, Torralba del Pinar, Pavías y, evidentemente, Higueras.
La ruta comienza en el casco urbano de Higueras, por la calle Umbría hacia la piscina municipal, a la derecha el profundo barranco de Villarejo que acompañará durante un tramo.
En este punto se vislumbran zonas de alcornoques que se salvaron del incendio de hace dos décadas que asoló una gran extensión de terreno, aunque afortunadamente se ha podido constatar que la naturaleza ha ido regenerando las laderas y barrancos que fueron pasto del incendio.
El camino descubre vistas hacia el barranco de Regoladera, custodiado por el pico de la Rueda y el paraje de la Pedriza. Poco a poco se va tomando altura: a los 892 metros las vistas se pierden en un terreno montaraz, donde el pico de Penyagolosa se alza majestuoso.
En este punto se transita por el término de Torralba del Pinar, por una senda flanqueada por un denso pinar joven; se sigue ascendiendo con brío hasta alcanzar un altozano desde donde se nos descubre de nuevo un panorama espectacular: la Sierra Calderona, el Alto de las Palomas y en la lejanía los Montes Universales, la Sierra de Gúdar y de nuevo el Macizo de Penyagolosa.
Ahora el barranco de Villarejo a queda a la derecha y la senda conduce a un collado, para enlazar con la antigua vereda de los Contrabandistas, que pronto va perdiendo altura, transitando por la ladera del barranco de la Fuente, para finalmente abocar al camino de la Fuente de Maricalva, con un paisaje más llano y humanizado, señales inequívocas de la cercanía de la población de Higueras, a la que se accede por la calle de la Solana.
En definitiva, ruta tranquila y sosesaga con un desnivel acumulado de 260 metros, en una jornada gélida en la que el termómetro apenas supero los 8º.
