El PSPV denuncia que la Pobla obliga a un pastor a pagar 612 euros por utilizar terrenos públicos para que paste su rebaño

El Ayuntamiento de la Pobla de Vallbona obligará a un pastor a pagar 612 euros para que su rebaño de ovejas pueda pastar en terrenos municipales. La medida del equipo de gobierno del PP ha causado una gran sorpresa por la grave crisis económica que azota al sector ganadero y se explica por la falta de liquidez del ayuntamiento fruto de la gestión del PP que ha situado la deuda municipal en 12'2 millones de euros.

Las cuentas municipales de 2013 incluyen una partida económica donde se recoge el ingreso de los citados 612 euros que el pastor deberá satisfacer a las arcas municipales si quiere que su rebaño de animales paste en algunos de los varios terrenos de propiedad pública existentes en el término municipal en cuyo interior se conservan abundantes hierbas para el alimento del ganado.

Mientras el equipo de gobierno anuncia rebajas de algunos impuestos que afectarán a colectivos muy concretos y reducidos de la población, el sector ganadero no se verá beneficiado con medidas concretas de apoyo. A la crisis de subsistencia de los pequeños ganaderos, el consistorio poblano se ha decidido por mantener los tributos municipales.

El PSPV ha calificado de “voracidad recaudadora” la actitud de la alcaldesa, Mari Carmen Contelles, del PP, por obligar al pastor al pago de los 612 euros “en un momento en el que muchas familias están sufriendo problemas para llegar a final de mes pero parece que el equipo de gobierno sólo se interesa por aumentar los ingresos municipales para pagar los 12 millones de euros de deuda”.

El grupo socialista ha defendido una mayor ayuda del ayuntamiento “hacia aquellos sectores económicos locales con mayores dificultades económicas con la elaboración y puesta en marcha de medidas de apoyo en lugar de aumentar el nivel impositivo en una profesión tan arraigada en la Pobla desde hace años como son los pastores de ganado”.

La existencia de numerosos corrales, explotaciones de animales y la proliferación de pastores de rebaños constituían un paisaje habitual en la Pobla pero ya ha pasado a la historia por culpa de la falta de apoyo e iniciativas del Ayuntamiento encabezado por la alcaldesa, Mari Carmen Contelles, más pendiente de potenciar su imagen pública antes que realizar una gestión adecuada para todos los ciudadanos. De hecho, el carácter despilfarrador del PP ha obligado a reducir el coste de algunos servicios como la limpieza viaria o a fraccionar el pago de la futura piscina cubierta, algo muy habitual en los últimos tiempos a causa de una gestión tan deficiente de los populares.

Además, la aprobación de planes urbanísticos durante los últimos años ha disminuido las zonas de paso y de pastoreo para este colectivo ganadero que sufre, también, una importante crisis de precios que no han sido óbice para que el Ayuntamiento de la Pobla imponga este tipo de gravámenes.