CSI·F reclama más plantilla para evitar el aumento de la inseguridad en la prisión de Picassent

El sindicato CSI·F alerta de la complicada situación que sufre el centro penitenciario de Picassent por la escasa vigilancia y control debido a la falta de funcionarios. Esta coyuntura se suma a la decisión del Gobierno de privatizar la seguridad externa de las prisiones, hasta ahora realizada por la Guardia Civil. El sindicato ha convocado una concentración este viernes 24, a las 11 de la mañana, en la puerta del centro, para protestar por estos factores que aumentan la inseguridad.

La Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSI·F) explica que, a diferencia de la mayoría de prisiones del territorio nacional, en la cárcel de Picassent sigue aumentando el número de presos que alberga. Este dato evidencia más si cabe la necesidad de reforzar la plantilla, que en la actualidad se encuentra bajo mínimos históricos. Pese a la alarmante situación, desde 2011 no se convoca oferta pública de empleo, lo que genera que no se repongan las jubilaciones del personal y que aumente la edad media de este colectivo de funcionarios, que en la actualidad se sitúa entre 48 y 58 años.

El sindicato informa de que además de esta grave merma de personal y, en consecuencia, de control y seguridad de los presos, el Gobierno central insiste en la pretensión de privatizar los servicios de seguridad externos de los centros penitenciarios. Esta prestación históricamente la han venido realizando efectivos de la Guardia Civil, ya que disponen de la preparación y los medios necesarios para mantener la seguridad en lugares de alto riesgo como las prisiones.

La central sindical exige a Instituciones Penitenciarias que promueva nuevas plazas de oferta de empleo para garantizar la seguridad, tanto de los funcionarios como de los presos, en los centros penitenciarios del territorio nacional. Del mismo modo, insta al Gobierno a rectificar su voluntad de privatizar los servicios de seguridad exterior de las cárceles.