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Valverde compara los 18 días que le ha durado a Berlusconi un ministro investigado con los 6 años que Rajoy mantiene a Fabra

  • El secretario de organización recuerda que Aldo Brancher está investigado por recibir un millón de euros entre 2001 y 2005 mientras Fabra recibió más del triple sin haber aclarado aún su procedencia

El secretario de organización del PSPV-PSOE y diputado provincial, Francisco Valverde, ha comparado hoy la rapidez con la que ha dimitido el último ministro de Silvio Berlusconi, Aldo Brancher, investigado por supuestamente haber recibido un millón de euros entre los años 2001 y 2005, cuando el presidente de la diputación de Castelló, Carlos Fabra, todavía no ha aclarado la procedencia de más de tres millones. Por este motivo, Valverde ha comparado los “18 días que le ha durado al todopoderoso Berlusconi el último ministro, con los seis años que lleva Mariano Rajoy y todo el PP aguantando a Fabra a pesar de estar imputado por cohecho, tráfico de influencias y fraude fiscal”.

En este sentido, ha lamentado la “desfachatez de Rajoy; de Francisco Camps en el ámbito de la Comunitat Valenciana, y de Alberto Fabra, Javier Moliner, Marisol Linares, Francisco Martínez y Vicente Aparici, de seguir dando cobertura al presidente de la diputación a pesar de los graves delitos que se le imputan y de los hechos que ya están contrastados por la propia Agencia Tributaria, que ponen de manifiesto que la declaración de la renta le salió a devolver durante seis años seguidos cuando en realidad tenía que haber pagado más de un millón de euros (166 millones de las antiguas pesetas), por lo que está a punto de sentarse en el banquillo de los acusados”.

Por todos estos motivos, Valverde insiste en que “todo el PP de Castelló será responsable del desenlace del Caso Fabra”, después de que a pesar de los graves indicios y de la decisión del juez de Nules de seguir adelante con todas las imputaciones de Carlos Fabra, le sigan defendiendo sin fisuras. Para el secretario de organización, “los más de 70.000 desempleados de la provincia de Castelló, así como toda la ciudadanía en su conjunto no se merece a una cúpula el PP que sigue defendiendo a un presunto defraudador a pesar de ser evidente que está a punto de sentarse en el banquillo de los acusados”. Por este motivo, Valverde le pregunta a Fabra “a quién le echa la culpa ahora, porque hasta el momento, todo era un montaje de Vilar; después de los fiscales; después de los inspectores de Hacienda y ahora sólo le queda atacar al juez, que es quien mantiene su imputación en lugar de haber archivado la causa”. El secretario de organización insiste en que “al PP ya no le quedan más cartas en la manga y, por tanto, será responsable directo de todo lo que pase finalmente con Fabra”.

De hecho, insiste en que “cada minuto que el presidente del PP, Mariano Rajoy, le mantiene en el cargo, supone un insulto para la decencia y la dignidad de la provincia de Castelló” y ha recordado que “basta poner el nombre de Carlos Fabra en Google para ver que prácticamente todas las entradas que aparecen son relativas a corrupción, fraude fiscal, tráfico de influencias, cohecho, insultos a la oposición, en definitiva un largo listado de actitudes impropias de una democracia moderna como la que tenemos y que hace que todo Castelló se avergüence del presidente de la diputación que tenemos, empezando por los miles de votantes honrados del PP que se sienten defraudados por la actitud de sus dirigentes, amparando estas conductas corruptas en plena crisis”. Además, ha mostrado su perplejidad por “declararse inocente cuando en seis años ha sido incapaz de aclarar a la opinión pública y en el propio juzgado –donde se negó a declarar- el origen de los ingresos millonarios que ha estado recibiendo en sus cuentas bancarias”.

Valverde ha insistido en que “la situación es grave no sólo para Fabra y para Castelló que por culpa de él no logra desligar su nombre del de la corrupción, sino que también para Mariano Rajoy, que prefiere mirar hacia otro lado, en lugar de actuar con contundencia y apartarlo de todos sus cargos que es lo que habría pasado en cualquier otro país de Europa, como ha pasado ahora en Italia, donde hasta un presidente que es conocido por sus problemas con la justicia no ha podido aguantar a un ministro por mucho menos de lo que se le acusa a Fabra”. Para el secretario de organización, “si esta conducta es inadmisible en democracia, lo es más en estos momentos, en los que hay más de 70.000 desempleados en la provincia de Castelló y donde sería imposible pagar los subsidios de desempleo y las pensiones a las personas mayores, si todo el mundo hiciera como él y escondiera el dinero a Hacienda”.

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