CSI·F reclama condiciones dignas para el personal fijo-discontinuo de la Agencia Tributaria en Castellón

La Sección Sindical de CSI·F en la AEAT de Castellón reclama a la Administración que los contratados fijos-discontinuos que prestan sus servicios en la Campaña del IRPF que comienza hoy en toda España, vean reconocida su antigüedad por tramos anuales y termine su discriminación.

Según indica el sindicato, el personal que trabaja en los Servicios Territoriales (SET) de Castellón es Laboral Fijo-Discontinuo, y muy pocos contribuyentes saben que tras atender la enorme carga de trabajo de la Campaña de la Renta volverán a sus casas- sin trabajo hasta la campaña del año que viene- a pesar de no ser trabajadores temporales, pues su contrato no se extingue y aunque hayan superado una oposición para consolidar su empleo en el año 2008.

CSI·F justifica esta reivindicación provincial en que “supondría un ahorro de medio millón de euros” y en que es lo más ético dada la finalidad de persecución del fraude fiscal y la acuciante falta de personal de este servicio público, con vistas a una novación del contrato a tiempo total contemplada en el Convenio Colectivo.

Así pues, el sindicato considera necesario hacer extensible las condiciones de Madrid y Barcelona, donde un centenar de fijos-discontinuos del Centro de Atención Telefónica (CAT) ocupan su plaza durante todo el año, al resto de provincias como Castellón, en las que el personal "ya está integrado, formado y cuya experiencia laboral están demostrando desde hace años". Más de 900 empleados de la AEAT padecen esta discriminación en el conjunto de España. En el caso de Castellón, la precariedad afecta a 16 empleados fijos-discontínuos y dos laborales interinas que asumen la carga de trabajo de esta campaña del IRPF.

En este sentido, CSI·F añade que en la Comunitat Valenciana, el pasado año se amplió el contrato a 7 fijos-discontinuos en la provincia de Valencia, a otros 7 en la provincia de Alicante y sin embargo, a una sola persona en Castellón. En este sentido, CSI·F reclama un trato igualitario y la extensión de sus contratos a todo el año así como el reconocimiento de una antigüedad total y no parcial, ya que es la Administración quien paraliza la prestación de servicios tras la Campaña del IRPF y les fuerza a cotizar solo por los días en que requiere de sus servicios y no por los que les obliga a estar disponibles pues su relación contractual persiste.

La Central Sindical estima que el coste de servicios externalizados que podrían ser prestados durante el año por este personal fijo discontínuo en todo el territorio nacional asciende a 9 millones de euros. Por ello se opone también a la privatización de servicios públicos en la Agencia Tributaria que afronta desde hoy una Campaña de la Renta 2015 marcada por la novedad el programa Renta Web que permite hacer la declaración desde móviles y tabletas.