elperiodic.com
SELECCIONA IDIOMA
Valencià

Mulet recuerda que el aeropuerto de Castelló no está adaptado para las nieblas

Mulet recuerda que el aeropuerto de Castelló no está adaptado para las nieblas

    El senador de Compromís, Carles Mulet, ha explicado hoy que a pesar de saberse desde el principio que la zona dónde, arbitrariamente y por intereses concretos, se quiso ubicar el aeropuerto de Vilanova, genera problemas por las condiciones atmosféricas (en especial los vientos y las nieblas), en ningún momento se ha trabajado cómo correspondería al dotarlo de las características que le permitirían poder funcionar con las nieblas que, como ya se advertían, son constantes en la zona y han ocasionado ya los primeros problemas al dejar inoperativas las instalaciones.

    Según Mulet “esta falta de previsión está ocasionando ya problemas a los usuarios y acabará generando un sobrecoste si se quieren acondicionar las instalaciones, lo que siempre acabamos pagando los contribuyentes. Despropósito detrás despropósito”. En ese sentido, el representante de Compromís a la Cámara alta ha recordado que el aeropuerto no está catalogado para actuar en esas condiciones de visibilidad; puesto que tendría que tener un sistemas de ayuda al aterrizaje específicos para esas condiciones meteorológicas.

    El de Castelló -según se ha podido constatar consultando con los técnicos- tiene un sistema de aproximación instrumental de Categoría I para la pista 06, y un visual, sencillo, a la pista 24 (las pistas son de entrada/salida 060/240), por lo cual no pueden aterrizar aviones en condiciones de visibilidad reducida.

    Esta Categoría I, tiene lo que se denomina un ILS estándar (ILS, son las siglas en inglés de Instrumental Landing System, Sistema de Aterrizaje por Instrumentos), que lo permiten aterrizajes con una visibilidad de 2.400 pies (732 metros), o 1.800 pies (549 metros) en caso de que la pista tenga iluminación de línea central y de la zona de toma, y un mínimo de techo de nubes de 200 pies (60 metros)

    El sistemas avanzados de Categoría II e III que, obviamente, no es este el caso, permiten operaciones de visibilidad casi cero, pero, a parte el aeropuerto tiene que estar certificado por esta categoría, con lo cual los sistemas de ayuda son más complejos y, por lo tanto, cuestan más dinero en inversión. Esto sólo lo tienen aeropuertos grandes. A parte, también necesitan de una certificación adicional del avión y la tripulación.

    En resumen: una cosa sabida por todos los que vuelan por esta zona es que de niebla espesa por allí, en invierno hay siempre y, por eso, probablemente esta ni será la primera ni la última vez que por esto pasa que se producen cancelaciones de aterrizajes, para no hablar de los vientos fuertes, que también pueden ser un grave problema cuando empiezan allá por noviembre o diciembre y hasta abril o mayo. “Desde el principio esta ubicación en terrenos del que era el vicepresidente de la Diputación, han generado infinidad de problemas y el de las nieblas ya advertimos será un verdadero quebradero de cabeza que, como siempre, si se quiere resolver, tendrá que acabar con una infinidad de trámites y sobrecostes que tendremos que pagar entre todos. Todo por entestarse en una ubicación nada razonable” ha concluido Mulet.

    Subir