El PSPV-PSOE se opone a la propuesta del pp sobre el azulejo “porque no permitiremos que aproveche la crisis para facilitar el despido y quitar garantías a los trabajadores”

La portavoz de Industria del grupo parlamentario socialista, Amparo Marco, ha lamentado que el PP “esté aprovechando la crisis que atraviesa todo el mundo para impulsar medidas que favorezcan el despido y mermen derechos a los trabajadores”, motivo por el que esta mañana han votado en contra de la propuesta del PP sobre el azulejo que contempla un punto específico para “flexibilizar el mercado”, lo que supondría una “grave amenaza para la continuidad de muchos puestos de trabajo”. En este sentido, Marco ha destacado que “en muchos puntos de la propuesta podríamos estar de acuerdo, porque ya hemos demostrado en reiteradas ocasiones nuestro interés por el sector, pero les hemos dejado claro que no van a contar con nosotros para impulsar medidas tan peligrosas como la de facilitar el despido y reducir las percepciones a las que tiene derechos los trabajadores y trabajadoras”. Marco se ha mostrado sorprendida por la “irresponsabilidad del PP, a la hora de plantear flexibilizar el mercado laboral en una provincia, como Castelló, que lidera el crecimiento del paro en toda España”. Para la portavoz de Industria, habría sido mucho más interesante que el PP “si de verdad le preocupa el tema del empleo, hubiera impulsado una iniciativa para instar a la Generalitat a que ejecute de manera inmediata todas las obras que tiene paralizadas desde hace años que vendrían muy bien en estos momentos en los que se precisa generar obra pública para crear puestos de trabajo, como sí está haciendo el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero con el Plan de Inversión Local, que ha supuesto para Castelló más de cien millones de euros”.

Marco ha lamentado que al PP sólo le preocupe facilitar el despido, cuando habría sido mucho más importante presentar una propuesta con medidas destinadas a reforzar los derechos de los trabajadores mediante la adopción de un Protocolo de progreso social; un nuevo pacto social en la crisis económica con el objetivo del pleno empleo, empleos de calidad, de estados del bienestar más fuertes, de desarrollo sostenible y regulación de los mercados financieros; una política social europea más fuerte, para poner en marcha la Unión Europea Social; un acuerdo justo sobre tiempo de trabajo que garantice la conciliación de la vida familiar, laboral y personal; mayor protección contra el aumento del trabajo precario y a favor de los trabajadores que tienen empleos precarios; una nueva estrategia industrial europea basada en la innovación, la investigación y desarrollo, la educación y formación y el desarrollo sostenible; la igualdad de oportunidades para luchar contra la discriminación, sobre todo la salarial, de forma que las medidas contra la crisis también beneficien a las mujeres, como decía un slogan suyo de campaña; mejor protección e igualdad de trato para los trabajadores migrantes y móviles y un fuerte compromiso contra el racismo y la xenofobia que especialmente resurgen en épocas de crisis.