Pañella: "Si el gobierno español grava el consumo de gas natural para las fábricas de cerámica, matará la gallina de los huevos de oro"
Dice que "la medida, en vez de aumentar la recaudación, podría implicar el cierre de fábricas y la pérdida de puestos de trabajo para miles de personas
El diputado por Castelló de Compromís, Josep Maria Pañella, ha comentado que "si hay en Castelló un sector que, dentro de la crisis generalizada, ha recuperado una parte de su actividad, este es el sector cerámico, debido a las exportaciones. Y este sector mantiene al menos un número considerable de puestos de trabajo, sirviendo así de un cierto freno al desempleo que se extiende por otros sectores. Pero ahora el gobierno español, en su afán recaudatorio inmediato, sin tener en cuenta las consecuencias, quiere gravar con un nuevo impuesto el consumo de gas natural para las industrias, un impuesto que, en el caso de la cerámica, según calcula la patronal Ascer, supondría un coste adicional de más de 43 millones de euros y una clara pérdida de competitividad frente a sus competidores”.
El diputado de Compromís ha asegurado que "esta medida sería un ejemplo de libro de aquello de "pan para hoy, hambre para mañana"; y es que el gobierno español sólo trata de hacer frente a las necesidades inmediatas más perentorias, sin pensar en las consecuencias. Si presiona una de las pocas industrias que mantiene un ritmo de exportación importante, y que garantiza un puesto de trabajo a miles de personas, lo único que haría sería matar la gallina de los huevos de oro, consiguiendo el efecto no querido que muchas empresas del sector tuvieran que cerrar o reducir personal, enviando así a la calle a muchos trabajadores y consiguiendo finalmente una recaudación menor, porque lo que ganaría por un lado lo perdería por el otro.”
Pañella ha considerado que "hay que pensárselo dos veces, antes de aplicar a un sector en relativa recuperación medidas que pueden hundirlo. Por eso, nuestro diputado en el Congreso, Joan Baldoví, le presentará una pregunta parlamentaria al ministro de Hacienda, para comprobar qué hay de cierto en este intento absurdo de gravar con un nuevo impuesto la cerámica castellonense, y para instarle a dejarse de experimentos que sólo podrían conseguir lo contrario de lo que se supone que quieren, aumentar la recaudación, y en cambio la podrían incluso reducir, con fábricas cerradas y trabajadores en la calle".
