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Los médicos de Castellón homenajean a José Alba, María Teresa Cid y Antonio Folch en la entrega de los premios Dr Boldó

  • El presidente del Colegio de Médicos reivindica un mayor peso de los médicos en la gestión e independencia en el ejercicio de la profesión

El Colegio Oficial de Médicos de Castellón y la Diputación Provincial han rendido esta tarde un merecido homenaje a los médicos José Alba Represa, María Teresa Cid Fernández y Antonio Folch Beltrán durante el acto de entrega del premio Enrique Boldó. Decenas de compañeros, médicos y familiares se han acercado a la Diputación Provincial en un acto en el que el Colegio de Médicos ha querido resaltar la labor de “todos los profesionales sanitarios en la batalla que diariamente libran para mejorar la salud de todos los ciudadanos”, según ha destacado el presidente del órgano colegial, José Antonio Herranz. El acto ha contado también con la presencia del vicepresidente de la Diputación Provincial, Miguel Barrachina, y el director de Asistencia Sanitaria de la Conselleria de Sanidad, Guillermo Ferrán.

La de este año es la séptima edición de unos premios que nacieron de la colaboración entre las dos instituciones y que distingue a aquellos médicos que han destacado por su compromiso profesional y por su relevancia social. El presidente del Colegio de Médicos, José Antonio Herranz, ha aprovechado el acto para agradecer el trabajo de un “colectivo médico de calidad y bien valorado por los ciudadanos, con buenos resultados en la gestión de la salud de los valencianos”. Un colectivo “dispuesto a asumir los cambios necesarios para garantizar la sostenibilidad de un sistema sanitario que se considera un logro social y al que nadie está dispuesto a renunciar”.

En esta situación, el representante de los médicos castellonenses ha instado a la necesaria aparición de “nuevos modelos de gestión donde los profesionales sanitarios dispongan de mayor autonomía”. Asimismo, ha señalado que el profesional sanitario “debe disponer de libertad de prescripción y de las condiciones de trabajo que le permitan actuar con independencia y garantía de calidad”. Por último, José Antonio Herranz considera que “las prestaciones del Sistema Nacional de Salud deben adaptarse a las auténticas necesidades asistenciales de la población y a las posibilidades reales de financiación”. En este sentido, ha aludido a la sensibilidad de los médicos y su esfuerzo para garantizar el derecho de todos los pacientes a una “atención médica de calidad, humana y científica”.

Los premiados

José Alba Represa (Vilavella, 1929) se licenció en Medicina en 1957 en la Universidad de Valencia. Colegiado en Castellón en 1961, trabajó como médico rural en diferentes pueblos de la provincia hasta que en 1972 llega al Hospital La Magdalena. Primero como jefe de Medicina Interna y más tarde, a partir de 1986, como director en funciones, desarrolla en este centro su actividad profesional hasta su jubilación. Destaca, asimismo, su papel como formador de muchos de los médicos internistas que ejercen en la actualidad.

María Teresa Cid Fernández ha sido una de las primeras mujeres en ejercer la medicina en la provincia de Castellón. De hecho, el Colegio de Médicos quiere reconocer, con este galardón, a todas las mujeres que desde hace décadas han hecho avanzar el campo de la medicina en la provincia. Nacida en Bodonal de la Sierra (Badajoz) y licenciada en Sevilla, María Teresa Cid llega a la provincia de Castellón en 1968. Tras trabajar como médico de atención primaria en Salzadella, ocupa plaza en el servicio de Análisis Clínicos del ambulatorio de Huerto de Sogueros, donde trabaja durante 20 años. Posteriormente, ocupó plaza en el laboratorio de Bioquímica del Hospital General de Castellón hasta su jubilación.

Antonio Folch (Alqueries, 1936), se licencia en Medicina en la Universidad de Zaragoza. Especialista en Obstetricia y Ginecología, se colegia en Castellón en 1963. Director de la Clínica Nuestra Señora de la Misericordia en 1973, ha compaginado a lo largo de su trayectoria el ejercicio privado de la profesión con su trabajo como médico de la seguridad social. Jubilado en 2010, muchos de los castellonenses nacidos a lo largo de los últimos 50 años, lo han hecho con la ayuda de Antonio Folch.

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