La Diputación presenta un programa experimental en el Centro Penitenciario I para fomentar la reinserción
La vicepresidenta del área de Acción Social de la Diputación de Castellón, Esther Pallardó, ha presentado un programa experimental al centro penitenciario Castellón I, que permitirá realizar actividades dirigidas a la población reclusa en las instalaciones. Así lo ha explicado en el Consejo Social Penitenciario, que lo integran la dirección del centro de Castellón y de todas las asociaciones que desarrollan una labor en la cárcel, siempre tendente a conseguir una adecuada reinserción social.
Este programa experimental se desarrolla en virtud del convenio marco aprobado entre la Secretaría de Instituciones Penitenciarias y la Diputación de Castellón, para desarrollar una serie de cursos, talleres y actividades culturales, lúdicas formativas e informativas mediante un programa de Voluntariado, que estará a cargo de la Asociación Arje Participación Ciudadana, así como la promoción de campañas de sensibilización, responsabilidad social e igualdad.
La Diputación de Castellón ha propuesto un plan de acción a realizar en la población reclusa del Centro Penitenciario de Castellón, que incluye una Propuesta Formativa Desarrollo Socio laboral tercer grado, Taller de motivación personal y liderazgo, un cineforum, charlas informativas en materias de interés de la población reclusa y exposiciones que resulten de interés por su temática, acompañadas de charlas didácticas y de interés para los internos.
En el Consejo Social, cada asociación puso de manifiesto el trabajo que se realiza en el centro, entre el que cabe señalar el programa de prevención del tabaquismo, el tratamiento de drogodependencias, inserción socio laboral, la prevención de la violencia de género, el tratamiento a maltratadores, la prevención con las familias y los talleres de costura y lectura, por citar algunos ejemplos.
En opinión de Pallardó las ONG,s y también, ahora, la Diputación “realizamos una importante labor social dentro del centro penitenciario para fomentar la reinserción social de los reclusos. Es importante por dos motivos: primero, porque toda esta labor redunda en una mejora social común, ya que cuando estas personas salen a la calle tienen más posibilidades de reinsertarse con éxito y no reincidir, lo que redunda en una menor conflictividad social; y segundo, porque garantiza el cumplimiento constitucional que reconoce la reeducación y la reinserción social en el cumplimiento de las medidas penales”.
