Puig hace balance positivo de Cevisama y reclama al gobierno las ayudas a la reindustrialización y mejora de la competitividad paralizadas desde diciembre

El portavoz de Industria del Grupo Parlamentario Socialista en el Congreso, Ximo Puig, ha realizado un balance positivo de la presente edición de Cevisama, que precisamente visitó el miércoles, y ha pedido a la Generalitat y al Gobierno de España que "cuiden un sector fundamental para la economía de la Comunitat Valenciana y muy especialmente de la provincia de Castelló". Puig ha recordado que los mejores resultados del sector se están obteniendo en el mercado exterior, por ello ha recriminado al PP el freno que supone para la promoción exterior la deuda que mantiene la Generalitat con Ascer, que supera los dos millones de euros, a lo que hay que sumar los más de tres millones que adeuda al Instituto de Tecnología Cerámica. Además, ha recordado que el Ministerio de Industria, desde la llegada del PP al Gobierno, ha paralizado las ayudas a la Mejora de la Competitividad y a la Reindustrialización, que en los últimos tres años del Gobierno de Zapatero y a pesar de la crisis, les había supuesto unas aportaciones de 59 millones de euros. Puig, que visitó la Feria junto al Síndic en Les Corts, Jorge Alarte, así como con el senador y ex alcalde de Onda, Enrique Navarro, además de la diputada por Castelló, Susana Ros; del portavoz de Industria en Les Corts, Francisco Toledo y del diputado provincial y portavoz en Onda, Juan Miguel Salvador, entre otros, ha destacado el firme compromiso de apoyo de los socialistas hacia un sector vital para el futuro de la economía provincial y autonómica. De hecho, ha recordado que fue el Gobierno socialista el que consiguió considerar al sector como estratégico, lo que le ha supuesto contar con ayudas millonarias, "frente a una Generalitat que ha cortado todas las líneas que había prometido para I+D, porque prefiere destinar los recursos públicos a eventos de dudosa rentabilidad". Frente a ello, "los socialistas estamos presentando iniciativas en todas las instituciones en las que tenemos representación, para pedir al Ministerio de Hacienda que las ayudas que da a los bancos circulen inmediatamente hacia las pymes, especialmente, hacia el sector cerámico". En la misma línea, pedimos al ministerio la negociación con las empresas energéticas para que los costes sean más competitivos y reclamamos la puesta en marcha del Plan Nacional de la Reforma de la Vivienda (rehabilitación) con subvenciones para los propietarios..

Puig ha recordado que el sector cerámico es un sector impulsor del crecimiento y desarrollo de la provincia de Castellón con más de 17.000 empleos directos y más de 6.000 indirectos. Desafortunadamente y a causa del estallido de la burbuja inmobiliaria, en los últimos dos años se han perdido más de 7.000 puestos de trabajo. En este momento, la supervivencia del sector pasa, fundamentalmente, por la exportación, a la que dedica el 60% de su producción, mientras que el comercio interior supone solo el 40%. Esta pérdida, según los socialistas, continuará porque es un sector estrechamente afectado por la construcción. Ha perdido parte de su demanda interior. Pérdida que supone durante el año 2011, un 15% mientras que la exportación ha aumentado un 7%. De hecho, los socialistas consideran que el azulejo es un sector que tiene que salir al exterior porque interiormente, no se espera un repunte del sector de la construcción y, precisamente, para salir al exterior, es fundamental la competitividad. De esta forma, para conseguir unos buenos niveles de competitividad es necesario solucionar problemas como la falta de crédito, ya que las entidades financieras están ocupadas solucionando sus problemas (saneamiento, compra de deuda, etc.) en lugar de ayudar a las pymes. Además, los costes energéticos han aumentado debido a la revalorización del dólar, a lo que hay que sumar la falta de ayudas de los programas de reindustrialización y mejora de la competitividad.