Gisbert: “Colomer llevará a cabo en la Diputación una revolución de proximidad para garantizar igualdad de derechos hasta en el último rincón de la provincia”
El responsable de programa contrasta el modelo “Moliner que representa continuidad del fabrismo, cambia las caras pero mantiene las formas, con el de un Colomer que gobernará desde y para todos los ciudadanos”
El PSPV-PSOE de Castellón está dando los últimos retoques al programa electoral de la provincia en el que dedica un apartado específico a la diputación de Castelló. Un trabajo fruto de las diferentes aportaciones realizadas por los secretarios de área de la dirección provincial; fruto de las convenciones programáticas celebradas hasta ahora; fruto de las numerosas reuniones de trabajo que diferentes representantes colectivos de la sociedad civil. En este sentido, el responsable de Programa del Comité Electoral de Castelló, Josep Gisbert, ha explicado que “los socialistas hemos querido dedicar un apartado específico a la diputación en nuestro programa electoral no tanto por la importancia relativa que tiene esta institución desde el punto de vista de las competencias, sino por la deriva que ha tomado en estos 16 años de fabrismo que la han convertido en una “colocódromo, ineficaz, poco operativo y altamente perjudicial para los intereses generales de los ciudadanos y ciudadanas de la provincia de Castelló”. Por este motivo, Gisbert ha calificado de “imprescindible” un cambio político el 22M para que una persona “caracterizada por su honestidad, capacidad de trabajo y compromiso con la ciudadanía como Francesc Colomer pueda redirigir el rumbo de una institución que, capitaneada hasta ahora por el fabrismo, ha situado a la provincia de Castelló en una complicada situación”. Gisbert ha recordado que a lo largo de la geografía Española hay ejemplso de diputaciones que funcionan de otra manera mucho más orientadas hacia los municipios y los ciudadanos. Por eso, el también secretario de Ideas, Programa y Formación, se muestra convencido de que “Colomer desde la diputación hará una revolución de proximidad, haciendo que en cada uno de nuestros pueblos y en cada rincón de nuestra provincia cualquier ciudadano llevar adelante su proyuecto de vida, bien el personal como el colectivo, porque tienen que estar garantizadas las necesidades básicas y el poder optar en igualdad de condiciones que cualquier otra persona, bien sea en Castello o en Castell de Cabres que es el pueblo más pequeño”.
Frente a ello, apunta Gisbert, “el modelo del señor Moliner no cambia las cosas, es el mismo, es el movimiento inercial del fabrismo que cambia las caras pero no es ningún Plan Renove. Es simplemente el modelo del PP, una extensión del propio partido a la institución provincial”. La diputación que a partir del 22M presidirá Colomer “tiene que cambiar el protagonismo para que pase del presidente a los ciudadanos; cambiar el foco de atención de las Aulas a los ciudadanos”. Para ello, Gisbert avanza que la diputación que presidirá Colomer será “austera, eficiente y municipalista”. Austera porque “entendemos que podemos liberar entre un 10 y 15 por ciento y liberarlo para inversiones productivas, eliminando organismos que no suponen duplicidades y no tienen cometido concreto. Reducir vicepresidencias, asesores, gasto corriente, y transfiriendo servicios impropios de la diputación que sería de la Generalitat”. “Haremos una diputación eficiente, menos burocrática que trabaje desde la concertación y propicie trabajo en red”, añade Gisbert para que sean “los ayuntamientos los que hacen las propuestas, conciertan con la diputación qué actuaciones se van a hacer, así el personal de la diputación pasa a ser asesor de los municipios y el trabajo en red supone utilizar economía de escala, para que los ayuntamientos tengan precios más razonables”. Por último, apuestan por “una diputación más municipalista y mucho menos presidencialista y esa es la imagen que queremos transmitir. Por eso, lo primero que haremos es una conferencia de alcaldes para definir la línea de actuación de la institución a cuatro años vista. A partir de ese momento se trabajará pensando en la sostenibilidad, la ocupación y la ciudadanía”.
En cuanto a medidas concretas, ha avanzado algunas como ofrecer a los ayuntamientos que estén interesados, la negociación conjunta de créditos locales para obtener una línea de préstamos a inversiones con un tipo de interés preferencial, con el objetivo de generar empleo al fomentar la inversión y pagar puntualmente a los proveedores. En la misma línea de ayuda a los ayuntamientos, la nueva diputación que impulsará Colomer concederá subvenciones a los intereses de los préstamos municipales para obras de inversión, también con el objetivo de incentivar actuaciones que generen empleo en una provincia que está a la cabeza del paro de toda España. También impulsará el Observatorio Provincial de Desarrollo económico y creará el Servicio de dinamización del Tejido productivo local y de los centros de servicios a las empresas. El objetivo será, entre otros, detectar oportunidades empresariales, asesorar, fomentar el autoempleo y apoyar a la pequeña empresa rural. En la misma línea, se incluiría un apartado para el Plan Vivero de Empresas, para que, mediante convenios entre ayuntamientos, la diputación y la propia conselleria de Econoía, se puedan establecer naves industriales de alquiler para la instalación de nuestras empresas, con opción a compra.
Para Gisbert, el 22M “los ciudadanos y ciudadanas tienen la oportunidad de cambiar las cosas. Los ciudadanos y ciudadanas tienen la oportunidad de enderezar el rumbo de una institución que necesita dar un cambio de 360 grados para que nunca más la diputación de Castelló sea conocida en España entera por ser la que más asesores tiene; por ser la que más despilfarra; por ser la que menos respeta las reglas del juego”. “El 22M los ciudadanos y ciudadanas de Castelló se juegan mucho. Unos se juegan seguir teniendo el trato ventajoso, el privilegio de que le enchufen; la suerte de que le den a dedo algún que otro contrato, pero la gran mayoría, la inmensa gran mayoría, se juega que cambien las cosas; que se respeten las reglas del juego democrático; que para aprobar una oposición dependa de haber estudiado y no de conocer al político de turno; en definitiva, que se respete la igualdad de oportunidades”.
Por eso, concluye Gisbert, “los socialistas consideramos absolutamente imprescindible un cambio político el 22M para que una persona caracterizada por su honestidad, capacidad de trabajo y compromiso con la ciudadanía como Francesc Colomer pueda redirigir el rumbo de una institución que en estos momentos se encuentra desnortada, desorientada y agotada políticamente”.
