La producción de cítricos cayó un 40% en 2008
En este sentido, los precios en campo crecieron hasta alcanzar los 0,9 euros el de los limones, 0,18 euros el de las naranjas, y entre 0,2 y 0,5 euros el de las mandarinas.
La producción de granadas descendió un 35 por ciento en la provincia, ya que el granizo que cayó en el mes de septiembre de 2008 destruyó el 85 por ciento de la producción de este fruto en el campo de Elche.
No obstante, las granadas a las que no les afectó el pedrisco se beneficiarán de las lluvias, ya que les reportarán un mejor calibre y sabor.
Las lluvias también repercutieron en la producción de cerezas de montaña de Alicante, cuya producción disminuyeron un 50 por ciento durante el año pasado respecto al anterior, si bien se han comercializado algo más de 700.000 kilos.
Otro dato significativo aportado por ASAJA en su balance anual es el descenso de la producción de uva para vino, que cayó un 8,7 por ciento en 2008, y que "rompe la tendencia la alza de las últimas cuatro campañas".
Sin embargo, el número de botellas de vino comercializadas bajo la denominación de origen de Alicante aumentaron un 3,8 por ciento, según datos del Consejo Regulador facilitados por la asociación agraria.
Por su parte, las cosechas de uva embolsada del Vinalopó, nísperos de Callosa d'En Sarriá y almendra se mantuvieron en 2008 en cifras similares a las de 2007.
ASAJA ha apuntado los problemas que los agricultores tienen con el agua, ya que "el intenso aprovechamiento" de los escasos recursos hídricos ha desencadenado en la "sobreexplotación, degradación y contaminación de las aguas continentales y subterráneas".
De este modo, los agricultores han considerado que los trasvases "son una pieza fundamental" para el sector agrario y han calificado de "atrocidad" la caducidad del Tajo-Segura contemplada en la modificación del Estatuto de Autonomía de Castilla-La Mancha.
"La finalización de este conducto supondría la muerte anunciada de nuestra agricultura", han manifestado fuentes de ASAJA, al tiempo que han reclamado al Gobierno central que retome el trasvase del Ebro.
Además, la organización agraria han resaltado los bajos precios que perciben los agricultores en origen y la falta de agua de calidad para el riego, lo que ha ocasionado que muchos agricultores, sobre todo en la comarca de la Vega Baja, hayan abandonado sus explotaciones a lo largo de 2008.
En este sentido, el 60 por ciento de la superficie cultivada en la citada comarca ha sido abandonada en los últimos cuatro años.
Los agricultores han destacado las situaciones desfavorables a las que se han expuesto los productores, tales como la desaparición de la tarifa eléctrica especial para riego, el incremento de los precios del combustible, los fertilizantes y los productos fitosanitarios.
En cuanto al sector ganadero, el encarecimiento de los piensos y la subida del precio de los combustibles propició el cierre del 60 por ciento de las explotaciones ganaderas de vacuno de cebo de Alicante y del 25 por ciento de los negocios dedicado a la cría de ganado ovino-caprino existentes en esta provincia durante 2008.
La asociación agrícola ha indicado que los ganaderos pierden 38 euros por cada cerdo que crían con destino al matadero y que las explotaciones de conejo que existían en las comarcas del norte de la provincia "han ido cerrando".
El subsector avícola también se ha visto afectado por la subida de los precios del pienso, del que "dependen al cien por cien", por lo que el 25 por ciento de las explotaciones de este tipo cerraron durante el año pasado.
