Los ingenieros técnicos de la provincia reivindican la homologación directa de sus estudios con los de Ingeniería de Grado
Las ingenierías técnicas de la provincia de Alicante han decidido aunar fuerzas en una iniciativa sin precedentes para que se les reconozca su capacitación profesional en la búsqueda de soluciones a los conflictos que durante los últimos meses paralizan y merman la competitividad de los colectivos profesionales que representan, no sólo frente a otras regiones europeas sino también frente a otras comunidades autónomas en España.
Son en concreto cinco ingenierías técnicas en Alicante las que han decidido buscar el respaldo mutuo: los ingenieros técnicos industriales, representados por su decano, Antonio Martínez-Canales; los ingenieros técnicos agrícolas, tutelados por su decano, Miguel Valdés; los ingenieros técnicos de telecomunicaciones de la Comunidad Valenciana, presididos por Pedro Antonio Pantoja; los ingenieros técnicos de minas, con su presidente Jesús Antonio Domínguez; y los ingenieros técnicos de obras públicas, representados por su decano Juan Alix. En total, más de 6.000 profesionales de la Ingeniería que desarrollan su trabajo diario en pro de la sociedad en la provincia de Alicante (500.000 en España) que son presa de la falta de ordenación profesional, a diferencia de lo que ocurre en el resto de Europa, y de la gran disparidad de criterios académicos y económicos que se han generado entre las diferentes universidades públicas y privadas en cuanto a la adaptación del título de Grado.
Desde estas ingenierías técnicas se considera que se debe de dar por el Gobierno una solución rápida y efectiva que resuelva esta problemática para dar respuesta a estos 6.000 profesionales susceptibles de obtener el Grado en su rama de la ingeniería que corresponda, evitando el mercadeo que conlleva la instauración de cursos puente en los que se valora de manera dispar la experiencia profesional.
La homologación supone la apertura a nuevas oportunidades en el mundo laboral europeo y a la opción de postular a posibles ofertas de trabajo en el mercado laboral. En la actualidad muchos ingenieros técnicos se encuentran con importantes obstáculos para homologar dichos títulos en otros países de la Unión Europea (Reino Unido, Grecia,…), lo que les cierra las puertas laborales y académicas a su desarrollo profesional. Esta anómala situación dentro y fuera de España está creando a estos profesionales una gran discriminación y un fuerte agravio comparativo con el resto de profesionales europeos de la Ingeniería en cuanto a la libre circulación de profesionales, tal y como se establece en la Directiva Europea de Servicios. Es importante resaltar la labor que en materia formativa vienen realizando los colegios anteriormente citados, ya que disponen de los medios necesarios para establecer la formación continua de los titulados que terminan en la Universidad y de sus colegiados, organizando no menos de 100 cursos por colegio y año, de manera que mantienen permanentemente actualizados los conocimientos obtenidos en su día en la Universidad y habilidades profesionales que requieren los nuevos avances tecnológicos que la sociedad demanda, lo cual es conocido por las distintas universidades alicantinas al haber sido realizados algunos de estos cursos en estrecha colaboración con ellas, e incluso con el reconocimiento de créditos académicos.
Hay oposiciones que no contemplan ya a los ingenieros técnicos, por lo que se les está excluyendo de ese mercado laboral. Para más gravedad del asunto, muchos titulados de otros países pueden homologar sus estudios y su título sin hacer ningún examen. Por ello, confiamos en que los políticos atiendan nuestra justa reivindicación y den un giro a esta situación, ya que desde el Consejo General de la Ingeniería Técnica Industrial (COGITI) se han venido poniendo en marcha proposiciones no de ley y preguntas parlamentarias tanto en las Cortes españolas como en el Parlamento Europeo de Bruselas que han concienciado a políticos y diplomáticos sobre el grave problema de los ingenieros técnicos que se sienten abandonados, discriminados y ante un importante vacío legal que resuelva esta problemática que afecta a todos estos profesionales en España.
También es necesario adoptar las medidas necesarias que faciliten la eficiencia y eficacia en la adaptación de nuestras enseñanzas al Espacio Europeo de Educación Superior, contribuyendo también al objetivo de crear una mayor posibilidad de empleo para nuestros universitarios.
Las cinco ingenierías antes señaladas respaldan además el Manifiesto sobre la obtención del Grado publicado por el COGITI y apoyan la homologación directa al Ingeniero de Grado, incidiendo en el reconocimiento de la experiencia profesional como aval de su capacitación técnica y como además en ocurre en Alemania, país más avanzado tecnológicamente dentro de la Unión Europea: los nuevos Ingenieros de Grado (Bachelor) sancionan 3 años de clases teóricas y 1 año de prácticas en empresas y trabajos profesionales.
