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Valencià
Por María José Navarro
Picos Pardos - RSS

Vida antes del tripartito

    Aunque a algunos les suene a ciencia ficción, antes del tripartito existía la vida asociativa y el movimiento social. Había asociaciones vecinales, de padres y madres, organizaciones juveniles, de personas mayores, de personas dependientes, de afectados por mil causas, de inmigrantes, de gais, lesbianas y transexuales, en fin, un amplio abanico de personas comprometidas socialmente por una u otra razón.

    El movimiento vecinal lleva más de 40 años trabajando por y para la mejora de los barrios, por y para la calidad de vida de la ciudadanía. Y ese movimiento, como el de las AMPAs, que tan bien conozco, ha debido sufrir momentos duros en las reivindicaciones y ha tenido que salir a la calle, una y otra vez, para pelear la urbanización de una calle o la mejora del alumbrado público, o la construcción de un nuevo centro de salud, o de un nuevo colegio o instituto, o la eliminación de unos míseros barracones, o la apertura de un comedor escolar…

    Y han sido años difíciles, que no lo dude nadie. Años en los que quienes estaban en el gobierno no escuchaban, no estaban abiertos más que a los que pudieran ofrecerles algo sustancioso a cambio del favor prestado (de esto tenemos muchas muestras en nuestra ciudad y en toda nuestra Comunidad)… Pero, a pesar de todas esas dificultades y gracias a ese esfuerzo compartido, a esa constancia de algunos y algunas, se ha conseguido mejorar los entornos, se ha podido disfrutar de esos servicios tan necesarios.

    Y nos hemos quejado de esos chanchullos institucionales, y hemos salido a la calle a denunciarlos, y hemos presentado batalla ante las injusticias sociales y los recortes de nuestros derechos… Sí, lo hemos hecho. Algunos alzando más la voz, otros con menos ímpetu, pero el movimiento ha seguido vivo y en la palestra.

    Cierto es que después de tantos años, sobre todo el movimiento vecinal, necesita un relevo generacional, pero para ello hace falta que la administración nos facilite los recursos para poder hacer de éste un movimiento atractivo para los más jóvenes, pues es necesario que, sea quien sea el que esté en el poder, se continúe reivindicando, reclamando, exigiendo, para que nadie se olvide de los y las ciudadanas y de sus derechos…

    Ahora corren nuevos tiempos políticos en nuestra Autonomía (afortunadamente no somos Galicia) y esos que han estado con nosotras y nosotros detrás de una pancarta, esos que nos han apoyado mientras estaban en la oposición, esos con unas ideas mucho más cercanas y abiertas, más tolerantes y, sobre todo, más sensibles a los temas sociales, parece que lo de la participación no lo han entendido demasiado bien, y se sienten atacados cuando reciben una crítica, arremetiendo contra todo lo que se menea…

    Pero es que las cosas no funcionan así. La ciudadanía activa debe estar ahí para seguir diciendo lo que se hace bien y lo que no, y si Valencia sigue estando sucia se lo diremos, y si lo de los libros de texto no lo han hecho bien, les explicaremos cómo se debería haber hecho, y si no nos gustan sus procesos participativos también reclamaremos unos procesos en los que de verdad se fomente la participación… porque nosotras y nosotros hemos estado en la brecha mucho antes de la era tripartita, y , como dice la canción, sabemos lo que queremos… y cómo lo queremos.

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