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Grezzi se equivoca

    Todas las personas nos equivocamos, y por tanto, los políticos también. Igual hasta más, pues quien más cosas hace más probabilidades tiene de equivocarse. Es casi un derecho, el de equivocación y el de rectificación. Grezzi (Compromís) tiene derecho de equivocarse, pero no tiene derecho a ridiculizar y a burlase de otros políticos. Si están muertos menos. 

    La polémica saltaba, otra vez, esta semana cuando el concejal de movilidad sostenible del Ayuntamiento de Valencia, Giuseppe Grezzi, colgaba en Twitter una imagen en la que aparecía la ex alcaldesa de Valencia, Rita Barberá, en la que ésta parecía ser el dinosaurio de la película Godzilla. Un montaje desafortunado en el que la que fue alcaldesa de Valencia durante 24 años aparece ridiculizada en respuesta a un tuit irónico de otro miembro de Compromís, el diputado Josep Nadal, en el que ironiza sobre la conveniencia de dedicar una calle en la ciudad a Barberá. 

    Grezzi tiene derecho a equivocarse, pero no a ridiculizar a una mujer que fue votada, libremente y en democracia, por miles de valencianos durante muchos años y que, a pesar de no haber revalidado la alcaldía en 2015, fue la candidata más votada por delante de todos los demás. Compromís debería cuidar más las formas, pues al fin y al cabo la política, además de gestionar, también es dar ejemplo y comportarse con respeto. 

    El respeto es fundamental en política y no todo vale. Grezzi se equivoca, y quienes no lo desautorizan, también. 

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