La Policía Local practica dos detenciones en los primeros días de intensificación de la vigilancia en el campo
La intensificación de la campaña de vigilancia en el campo por parte de la Policía Local de Nules está dando resultados efectivos ya que, en los primeros días se han practicado ya dos detenciones, al tiempo que en tan solo dos jornadas se han efectuado hasta 38 identificaciones y comprobaciones de vehículos (turismos y furgonetas), un balance inicial que el concejal de Seguridad Ciudadana, Alejandro Borrás “constata la importancia de la presencia de la policía en los controles permanentes y aleatorios, para prevenir posibles robos, o frustrar los que se hayan cometido”.
De hecho, Borrás ha destacado que "en tan solo dos días se han realizado dos detenciones como consecuencia de estos controles intensivos”. Por una parte, una de las detenciones se produjo el pasado lunes, cuando los agentes de la Unidad Especial de Proximidad, junto con una patrulla de servicio ordinario, estaban realizando uno de los controles aleatorios en el ámbito rural, en concreto en el Camí La Ratlla con Camí Caminàs. Ante las maniobras sospechosas de su conductor, los agentes procedieron a su intercepción, descubriendo que estaba ocupado por tres personas de nacionalidad rumana, siendo el conductor un vecino de Burriana de 48 años de edad con antecedentes policiales por estafa y buscado por un juzgado de Valladolid. Los agentes procedieron a su detención y puesta a disposición judicial.
La segunda detención se produjo en el Camí del Motor del Pinet, donde se identificó a un camión con un peso superior a los 3.500 kilos. La persona que iba al volante conducía sin la correspondiente documentación y con el carnet caducado.
Borrás ha recordado que el próximo lunes se celebrará en el municipio una Junta Local de Seguridad en la que, además de tratar las colaboraciones con las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado en este dispositivo especial de vigilancia rural, también se tratarán otras cuestiones, con el objetivo principal de “coordinar acciones que nos permitan garantizar la seguridad de los vecinos, tanto en el campo, como en el casco urbano, porque esa es nuestra prioridad absoluta, especialmente en épocas en la que aumenta la presencia de grupos de personas conflictivas y que generan problemas de convivencia y también de seguridad”.
