El Ayuntamiento identifica el foco de proliferación de los mosquitos en un vertido de purines líquidos

A última hora de la tarde de ayer el Ayuntamiento de Nules identificó el que probablemente será el foco de proliferación de mosquitos que este fin de semana ha provocado evidentes molestias entre los vecinos de las playas de Nules. Se trata de un vertido de purines líquidos en una parcela agraria en la zona conocida como Finca del Pou, que se ha comunicado la necesidad de paralizar como medida preventiva hasta que se determine si el citado vertido es legal.

El concejal de Medio Ambiente, José Manuel Casaus, señala que en cuanto el Ayuntamiento tuvo conocimiento de la proliferación de estos insectos y de las numerosas molestias que estaba provocando entre los vecinos, se iniciaron las tareas de fumigación de la zona afectada “como ya se ha hecho en otras ocasiones”. En concreto ya se tuvo que actuar en Pascua, después de un período de lluvias persistentes, dado que la acumulación de agua estancada en algunas zonas provoca la aparición de esta especie concreta de insecto.

En aquel momento, hace aproximadamente un mes, la concejalía de Medio Ambiente se puso en contacto con la empresa TRAGSA, especializada en el control de plagas en el ámbito de la Comunidad Valenciana, cuyos técnicos se trasladaron a Nules acompañados por un especialista a nivel europeo de la FAO, que tras realizar diferentes pruebas descartó que se tratara del mosquito tigre, aunque sí que identificó a una variante del mosquito común más grande y más agresiva, que es el mismo que está provocando los problemas estos días en la localidad.

Ya en ese momento se realizó un tratamiento biológico “selectivo y que no perjudica a otras especies” y hasta el momento no se habían detectado nuevas incidencias, es por lo que el Ayuntamiento considera que han sido los vertidos de purines puntuales los que han desencadenado la proliferación masiva de los insectos estos días.

Fueron precisamente los operarios de la sección agraria los que detectaron olores a estiércol mientras fumigaban la zona donde se estaban produciendo el mayor número de avisos y quejas. Inmediatamente pusieron en conocimiento de la concejalía de Medio Ambiente este hecho y se notificó a la Policía Local, quién logró identificar en la zona conocida como la Finca del Pou “una gran extensión labrada y abonada con purines líquidos superficiales, donde los agentes vieron una concentración masiva de mosquitos”. El paso siguiente fue identificar y localizar al responsable de la parcela que “confirmó que desde el miércoles 8 de mayo al viernes 10 había estado realizando este abono con purines líquidos, lo que coincide con la aparición de esta pequeña plaga”.

Las evidentes molestias tanto por los olores, como por la proliferación de los insectos, ha llevado al Ayuntamiento a paralizar los vertidos e iniciar una investigación “para determinar si este tipo de tratamiento tiene autorización, ya que si no es así tomaremos las medidas que correspondan”.

En cualquier caso, Casaus insiste en que durante toda la mañana de hoy se ha procedido a intensificar el tratamiento biológico sobre la parcela en cuestión “y ya nos hemos puesto en contacto con los técnicos de TRAGSA y empresas privadas para tomar las medidas más efectivas y erradicar a la mayor brevedad posible el problema”.

Dado que gran parte de los primeros afectados fueron agricultores ayer, coincidiendo con la reunión del Consell Agrari Municipal, se informó de todos los pasos que ha seguido el Ayuntamiento, así como de todas las medidas que se pretenden tomar, en cualquier caso, Casaus aconseja a la ciudadanía que hasta que se pueda eliminar por completo la presencia masiva de estos insectos, “la gente debería tomar medidas preventivas para evitar las molestias que provocan estas picaduras, que según nos han explicado los expertos pueden tener reacciones alérgicas muy fuertes”.