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L. Lobón: “El Gobierno no ha sabido liderar el proceso de diálogo y ha improvisado una reforma laboral”

  • El secretario autonómico ha clausurado en Alicante una jornada sobre la Reforma Laboral

  • El real-decreto del Gobierno introduce cambios mínimos y no aborda con seriedad aspectos de gran relevancia

  • Es necesario reducir la desigualdad existentes en el mercado de trabajo y que perjudica a determinados colectivos

El secretario autonómico de Empleo, Luis Lobón, ha manifestado que “El Gobierno Central no ha sabido liderar el proceso de diálogo y ha improvisado con prisas una reforma laboral”.

“A ello hay que unir –ha añadido Lobón- el escaso apoyo por parte de los grupos parlamentarios que ha tenido el Decreto-Ley de la Reforma Laboral”.

“Es una norma en la que el propio Gobierno no cree y que sólo ha puesto en marcha por la presión de los mercados y de las instituciones internacionales”, ha señalado el secretario autonómico.

Luis Lobón ha realizado estas declaraciones en Alicante, durante el acto de clausura de la jornada “La Reforma Laboral, nuevas reglas del juego”, organizada por la Asociación para el Progreso de la Dirección (APD)

Durante su intervención, el secretario autonómico de Empleo ha explicado que la crisis económica y financiera que estamos atravesando ha afectado de manera distinta a los distintos países, lo que también está influido en los procesos de recuperación de las economías.

En el caso de España, esta crisis ha hecho aflorar debilidades estructurales de la economía que durante los periodos de expansión permanecieron latentes.

Como ha explicado Lobón, “la rigidez de las instituciones laborales de este país hace que, ante las oscilaciones de la actividad económica, el ajuste recaiga casi exclusivamente sobre el número de puestos de trabajo”.

Por ello era necesaria al inicio de la crisis la adopción de una serie de reformas de ámbito laboral, como ha el secretario autonómico, pero “el Gobierno no ha sabido hacerlo”.

“El Gobierno dice que con la reforma pretende reducir la dualidad y la temporalidad; favorecer la flexibilidad interna de las empresas; fomentar el empleo de los jóvenes y las personas desempleadas; y mejorar la intermediación laboral”, ha afirmado Lobón.

Sin embargo, Lobón ha dicho que la reforma presentada por el Gobierno no profundiza de verdad en estas medidas. “Sigue siendo necesario avanzar hacia el establecimiento de un contrato único, con indemnización creciente con el tiempo, o estudiar otros mecanismos que sean capaces de evitar la excesiva temporalidad y facilitar los procesos de formación y aprendizaje”.

Por otra parte, respecto a los mecanismos para favorecer la flexibilidad interna de las empresas para frenar la destrucción de empleo, el secretario autonómico ha señalado que “los puntos que plantea la reforma llegan mal y tarde. La efectividad de las políticas no depende sólo de si van en la dirección adecuada, sino también de si tienen la suficiente intensidad y si se adoptan en el momento oportuno”.

Además, Luis Lobón ha señalado que hay aspectos en esta reforma que no se han abordado con la suficiente profundidad. “Se echa un falta un avance real hacia la modernización del sistema de negociación colectiva y además es imprescindible una modernización de las políticas activas de empleo que faciliten los procesos de transición de los trabajadores entre sectores y ocupaciones”.

“La reforma de las políticas activas de empleo debe plantearse en línea de concentrarlas hacia los trabajadores con menos cualificación, gestionarlas de forma coordinada con otras políticas, permitir mucha mayor flexibilidad para su gestión y evaluarlas rigurosamente, avanzando hacia un sistema de trabajo por objetivos”, ha añadido el secretario autonómico.

Por otra parte, también ha hecho hincapié en la necesidad de modernizar el sistema de protección al desempleo, “procurando elevar la protección pero sin desincentivar la búsqueda de empleo”.

Otros aspectos

Durante su intervención, el secretario autonómico de Empleo ha destacado la necesidad de reducir las trabas administrativas y burocráticas para la creación y el funcionamiento de las empresas, así como mejorar el sistema educativo de modo que la formación profesional esté más cerca de las necesidades de las empresas.

Además, como ha afirmado, “es necesario incrementar la capacidad innovadora de la economía, a la vez que flexibilizar y dinamizar los mercados de bienes y servicios para que los recursos se asignen a las actividades más productivas”.

“La encrucijada en la que hoy se encuentra la economía española es posiblemente la más crítica de las últimas décadas ya que nos enfrentamos a la necesidad de superar un modelo de crecimiento ya agotado, y la reforma laboral es un aspecto esencial para lograr este cambio del modelo”, ha concluido Luis Lobón.

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