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AIDICO se une a una plataforma dedicada al abastecimiento de agua y tecnologías de saneamiento

  • El Consell impulsa la labor de los 14 Institutos Tecnológicos de la Comunitat con una inversión de 47 millones de euros para este año

El Instituto Tecnológico de la Construcción (AIDICO) se ha incorporado como miembro activo de la plataforma internacional WssTP, creada en 2004 por la Comisión Europea para promover la coordinación y colaboración en el desarrollo tecnológico de la industria del agua.

AIDICO pertenece a la Red de Institutos Tecnológicos de la Comunidad Valenciana (REDIT) y está impulsado por la Conselleria de Industria, Comercio e Innovación, que para este año va a invertir 47 millones de euros en los 14 Institutos Tecnológicos para que desarrollen su labor de apoyo a la I+D+i empresarial.

El ingreso en esta plataforma está vinculado al trabajo que realiza este centro desde una de sus áreas de trabajo, dedicada exclusivamente a la investigación y el desarrollo de proyectos dirigidos a mejorar las técnicas de depuración del agua e incrementar el volumen de recursos disponibles.

La plataforma WssTP está constituida tanto por empresas y entidades vinculadas a la industria del agua como por centros académicos, centros de investigación y usuarios, con el objetivo de lograr una visión desde todas las posibles perspectivas que permita mejorar la eficiencia en el sector. Concretamente, a través de la Agenda de Investigación Estratégica (SRA), ofrece respuestas estratégicas para el reto de búsqueda de agua en el futuro.

Para identificar los problemas específicos de los 27 países europeos que constituyen la plataforma, la WssTP cuenta con representantes nacionales que identifican e informan sobre el estado del agua en sus correspondientes territorios.

Con la incorporación a esta plataforma internacional, AIDICO se ha convertido en representante nacional de nuestro país para informar y buscar soluciones a los problemas de agua que padece España, especialmente la Comunitat Valenciana.

Desde hace un año, AIDICO cuenta con un área de investigación dedicada al estudio de los recursos hídricos subterráneos existentes en la Comunitat Valenciana, con el objetivo de lograr una correcta gestión de éstos y dar un buen servicio en los distintos sectores.

Los trabajos de esta área se centrarán en la evaluación, gestión, tratamientos y reutilización de los recursos hídricos en al Comunidad Valenciana; así como en la mejora de la gestión y consumo del agua en las industrias. Las líneas principales de investigación que desarrolla ADICO son: Aguas subterráneas (como la mejora de la calidad de éstas mediante recargas artificiales entre otras actividades), Aguas Industriales (optimizar el uso del agua en la industria) y desalación de aguas salobres (reducción de la conductividad de estas de forma económicamente sostenible).

Es difícil estimar la cantidad de agua que se necesita para mantener estándares de vida aceptables o mínimos. Además, las diferentes fuentes de información emplean diferentes cifras para cifrar el consumo total de agua y su uso por sectores de la economía.

En volumen, sólo 3% de toda el agua del mundo es agua dulce, y en su mayor parte no se halla generalmente disponible. Unas tres cuartas partes de toda el agua dulce se halla inaccesible, en forma de casquetes de hielo y glaciares situados en zonas polares muy alejadas de la mayor parte de los centros de población. Sólo un 1% es agua dulce superficial fácilmente accesible.

La contaminación está muy generalizada. Pocos países, sea en desarrollo o industrializados, han protegido adecuadamente la calidad del agua y han controlado su contaminación. Muchos de ellos carecen de normas para controlar el agua de manera adecuada, mientras que otros no pueden hacer cumplir las normas de calidad del agua.

Los datos de agua contaminada son alarmantes. Según la Organización Mundial de la Salud (OMS) al menos 25.000 personas mueren cada día en el mundo por causas derivadas de su consumo. Según estudios hechos por expertos, y como consecuencia del llamado efecto invernadero, las grandes lluvias aumentarán en las próximas décadas y habrá menos lluvias moderadas. Al mismo tiempo, las aguas frescas y limpias se están transformando en aguas residuales. Cada vez hay menos agua de calidad utilizable para el consumo humano, mientras que aumentan los volúmenes de aguas contaminadas.

Muchos expertos afirman que en un futuro no lejano, el agua tendrá un valor mayor que el petróleo y su consumo deberá racionarse. Por ello, es muy importante comenzar a planificar un uso eficiente sin derroche y equitativo suficiente para todos.

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