El Consell asegura que la reserva hídrica de Castilla-La Mancha amenaza una producción hortofrutícola cuyo valor asciende a 540 millones de euros
La pérdida del aporte hídrico del Tajo-Segura pone en peligro algunos de los cultivos más competitivos de la Comunitat y el tejido industrial que genera
Maritina Hernández critica la insolidaridad y falta de criterio del Ejecutivo central y recuerda que el President Camps sí trabaja para garantizar la llegada de agua a la Comunitat
La Consellera ha señalado que la pérdida del aporte hídrico que supone el Tajo-Segura “pone en peligro el futuro de algunos de los cultivos más competitivos como la granada, la uva de mesa del Vinalopó o la producción de pimiento, así como la citricultura del sur de la provincia, pero también de todo un tejido industrial y de servicios que genera a su alrededor y que ejerce un efecto multiplicador tanto a nivel económico como en número de empleos”.
Maritina Hernández ha hecho hincapié en que el agua “debe ser fruto de una política nacional, que piense en todos los españoles, sustentada en el principio de la solidaridad. Una solidaridad que mostramos los valencianos siempre ante cualquier aspecto de nuestro quehacer y que exigimos al resto de comunidades autónomas y al gobierno de España”.
En este sentido, ha lamentado la actitud insolidaria de los gobiernos socialistas de Castilla-La Mancha y España y las decisiones que en materia hídrica ha venido adoptando el Ejecutivo. “Si tuviésemos en marcha el Plan Hidrológico Nacional tal como se concibió, un verdadero pacto de Estado, no estaríamos hablando de estos problemas”, ha indicado.
Maritina Hernández ha subrayado el compromiso de la Generalitat y ha recordado la presencia del President Camps en Bruselas donde ha reclamado que la Directiva Marco del Agua contemple el concepto de cantidad de agua con el objetivo de asegurar los trasvases a la Comunitat.
“Necesitamos agua de calidad y en cantidad suficiente para mantener el nivel de prosperidad alcanzado en los últimos años y por ello, no vamos a renunciar a ningún derecho que se vincule al uso del agua, tanto para la agricultura como para la sociedad”, ha añadido.
La Consellera ha explicado que desde el Consell, “como gobierno, somos firmes defensores de los trasvases, de los que no están hechos, como el trasvase del Ebro, pero desde luego de los que están en marcha y han influido muy positivamente en el campo valenciano y especialmente en el alicantino, pero también en todos los sectores productivos y en el agua para beber. Por lo tanto somos firmes defensores del Tajo-Segura”, ha explicado.
