El centenario Ruperto Chapí concluye con más de doscientas actividades
Más de cien conciertos de zarzuela y otros géneros, un congreso mundial, danza, conferencias y exposiciones contribuyen a difundir la figura del compositor de Villena y a devolverle su lugar en los escenarios
Así lo han puesto de manifiesto hoy el comisario del centenario, Javier Casal, la directora del Institut Valencià de la Música, Inmaculada Tomás, y el director del Instituto Complutense de Ciencias Musicales, Emilio Casares, durante una rueda de prensa de presentación del balance de este ciclo.
En las más de doscientas actividades programadas en el centenario han intervenido diversas instituciones como la Generalitat, el Ministerio de Cultura, la Sociedad General de Autores y Editores y la Diputación de Alicante, entre otras.
“Ha sido un centenario muy pleno, con actividades grandes y pequeñas y que ha funcionado muy bien, no sólo por la importancia de Chapí, sino también por la suma de muchos esfuerzos, suma que ha permitido tocar todas sus facetas”, ha asegurado Casal.
Por lo que se refiere a las iniciativas llevadas a cabo con la intervención del IVM, Inmaculada Tomás, ha destacado el congreso, en el que participaron más de cuarenta especialistas de diversos países y en el que se dio luz a aspectos poco conocidos de la figura del compositor, como su enorme proyección e influencia en Hispanoamérica, su ideología progresista y la gran calidad de obras suyas de todos los géneros, especialmente la ópera, que no han tenido la acogida que merecen en los escenarios europeos en las últimas décadas.
El simposio, cuyos resultados se publicarán el año que viene, ha abierto nuevos campos de investigación para los estudiosos y propiciará la recuperación de partituras para que su extensa producción tenga cabida en las programaciones de todo el mundo.
El Instituto Complutense de Ciencias Musicales, ha sacado, con el patrocinio del IVM, las ediciones críticas de dos colecciones de partituras de Chapí tanto de obra sinfónica –enviada por la SGAE a todas las orquestas españolas– como zarzuelística y ha reeditado la biografía de 1995 de Luis G. Iberni, considerada la obra de referencia sobre el compositor de Villena.
Hoy se han presentado las dos referidas colecciones. La segunda, que reúne las obras Las bravías, La Chavala y Música clásica, contiene un prólogo de la consellera de Cultura i Esport, Trini Miró.
Casares ha anunciado que “aún no se ha hecho del todo justicia a este genio de la composición”, y este déficit se ha producido sobre todo en su faceta lírica.
El profesor ha añadido que “quedan aún muchas vertientes por investigar de Chapí”, así como varias obras desconocidas en las que actualmente trabaja el ICCMU y que ponen de relieve la dimensión experimental y vanguardista del autor.
El IVM, por su parte, publicó una edición crítica para banda de Fantasía morisca que se repartirá a todas las bandas de la Federación de Sociedades Musicales de la Comunidad Valenciana, y que las bandas ganadoras del certamen comunitario de 2008 interpretaron en Alicante, Castellón y Valencia con motivo del Día de la Música Valenciana en abril y mayo de 2009.
Las dos unidades artísticas del IVM, la Jove Orquestra y el Cor de la Generalitat también se sumaron a los actos conmemorativos. La primera dedicó su segundo encuentro de 2009 a Chapí e interpretó la Sinfonía en re en cuatro municipios valencianos, mientras que el segundo intervino en la producción de El rey que rabió del Palau de les Arts Reina Sofía, tanto en las representaciones en Valencia como las dos que se llevaron a cabo en el festival Castell de Peralada.
El ciclo Xarxa Musical Valeciana, un programa del IVM en colaboración con más de cincuenta municipios valencianos, acogió, gracias a un convenio con Ibercaja, una decena de conciertos con obras de Chapí en otras tantas localidades de la Comunitat, a los que asistieron cerca de 3.500 espectadores, además de once sesiones dentro del llamado ciclo lírico, en poblaciones como Llíria, Denia, Utiel, Banyeres, Villena o Alzira, entre otras.
Ruperto Chapí (Villena, 27/3/1851-Madrid, 25/3/1909) fue uno de los músicos más destacados de la España de la Restauración. Nacido en Villena (Alicante) y de origen humilde, se formó en el Conservatorio de Madrid y completó sus estudios en Roma y París.
Una figura comprometida
Tras su regreso a Madrid, comenzó una brillante carrera que le convirtió en un referente de los teatros musicales de todo el ámbito hispano, con obras de gran éxito como La revoltosa, La bruja o Margarita la tornera, dentro de un catálogo de más de doscientos títulos.
Su interés por el teatro musical le llevó a cultivar con fortuna todos los géneros de su época: ópera, zarzuela grande y género chico u opereta. Merece también especial mención su interesante aportación a la música para banda, sinfónica y camerística. Todo ello convierte al de Villena en una figura fundamental de la actividad musical de su época.
Impulsó la creación de la SGAE para defender el eslabón más débil de la música en sus tiempos, la del creador, a pesar de hallarse en la cumbre.
