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Maritina Hernández apuesta por la investigación como elemento clave para desarrollar tecnología propia que disminuya los costes de producción

Maritina Hernández apuesta por la investigación como elemento clave para desarrollar tecnología propia que disminuya los costes de producción
  • La Conselleria trabaja con el sector en un proyecto de I+D+i del pimiento con el objetivo de obtener nuevas variedades de calidad, muy productivas y resistentes a los patógenos

  • Hernández asegura que “este proyecto demuestra el compromiso del Consell con la horticultura frente a la falta de apoyo del Gobierno al sector”

La consellera de Agricultura, Pesca y Alimentación, Maritina Hernández, ha apostado por la investigación como elemento clave para desarrollar tecnología propia valenciana que disminuya los costes de producción y permita rentas más beneficiosas para el agricultor.

Maritina Hernández ha visitado hoy las instalaciones de la cooperativa Surinver para analizar los resultados obtenidos hasta el momento en el proyecto de I+D+i de mejora del pimiento, impulsado por el Consell y que se está desarrollando en colaboración con Surinver, Anecoop y la Universidad Politécnica de Valencia, con el objetivo de obtener nuevos híbridos comerciales a partir de la variedad California.

Asimismo, la titular de Agricultura ha asegurado que “este proyecto demuestra el compromiso del Consell con la horticultura, frente a la falta de apoyo del Gobierno central al sector, que ha desestimado un plan para impulsar la horticultura a nivel nacional, dotado con 100 millones de euros y con el que se había comprometido”.

En este sentido, ha mostrado el apoyo del ejecutivo valenciano a la investigación, la producción, la comercialización y la industrialización de estos productos, a través de la elaboración de planes y programas dirigidos a su desarrollo y potenciación.

Cabe destacar que los híbridos objeto de esta investigación son experimentados en los campos de ensayo de esta cooperativa para evaluar su producción, calidad y adaptación a las condiciones agroclimáticas de Alicante. De entre ellos se seleccionarán los que se utilicen en cultivos comerciales.

Maritina Hernández ha explicado que se trata de “una investigación que tiene como objetivo desarrollar nuevas variedades de esta categoría de pimiento adaptadas específicamente al cultivo del sur de Alicante, que se produzcan entre los meses de abril y septiembre, que requieran de unas necesidades de calefacción mínimas, resulten resistentes a los patógenos más comunes de la zona y sean, además, muy productivas, utilizando para ello herramientas clásicas de mejora genética como son la selección y la hibridación”.

En este sentido, la titular de Agricultura ha asegurado que “este proyecto de carácter integral, desarrollado desde el propio sector, permitirá también disponer de una tecnología propia valenciana para producir aquí las semillas abaratando significativamente su coste para el productor, ya que no necesitará adquirirlas, a precios elevados, en otros países a través de multinacionales”.

Con este fin se ha trabajado en la evaluación en campo de más de 40.000 plantas, analizando su ADN y realizando estudios de resistencia a enfermedades, así como operaciones de hibridación artificial.

Asimismo, ha recordado que el importante peso de la horticultura dentro de la producción vegetal de la Comunitat Valenciana y ha destacado que, concretamente, desde la década de los 70, el cultivo de pimiento “ha sido un eje fundamental de la agricultura y la economía en la zona de Pilar de la Horadada”.

Maritina Hernández ha afirmado también que “este tipo de iniciativas son las que pueden hacer que nuestra agricultura siga siendo competitiva, por eso, la investigación y la transferencia de resultados al sector es una de las prioridades del Consell en el ámbito agrario, con el objetivo de proporcionar alternativas de cultivo a los agricultores”.

Cabe destacar que este proyecto de investigación, se inició en el año 2006, y en él participan también Cajamar, Hortamira y la Fundación Ruralcaja Alicante. El programa tiene una duración prevista de cinco años e integra metodologías convencionales con los últimos avances biotecnológicos, con una inversión de la Conselleria que alcanzará un total superior al millón de euros.

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