El PSPV insta a que el Gobierno elimine la tasa de reposición de las universidades
El grupo parlamentario socialista en Les Corts ha presentado una Proposición no de Ley con respecto a la promoción del profesorado universitario ligada a la tasa de reposición. En concreto, tal y como ha destacado la portavoz de Educación, Eva Alcón, a través de esta propuesta se insta al Consell a que el Gobierno elimine la tasa de reposición para que las universidades, en virtud de su autonomía universitaria y disponibilidad presupuestaria puedan diseñar y rendir cuentas de los mecanismos y de los resultados de la carrera profesional del personal docente e investigador.
Del mismo modo, insta a que, en caso de que se deba mantener la citada tasa de reposición, “considerar las plazas de catedrático como plazas de promoción y, por tanto no sujetas a la limitación que supone la misma, igual que sucede en otros cuerpos del Estado”. Así mismo, refleja la necesidad de “no compatibilizar las plazas de profesorado contratado-doctor a la hora de calcular la tasa de reposición”.
En este sentido, la diputada del PSPV-PSOE ha querido subrayar que las universidades “hace tiempo que trabajan para que el profesorado pueda desarrollar su carrera docente e investigadora en condiciones óptimas” y ha recordado que el Gobierno, en los últimos años, “ha condicionado la promoción del profesorado universitario a la tasa de reposición, es decir, a que se convoquen plazas de profesorado según las jubilaciones que se produzcan”. De hecho, y pese a que el próximo año la tasa se fija en el 100%, “esta medida no es suficiente para garantizar la promoción del profesorado acreditado ni la renovación de las plantilla de las universidades públicas valencianas”.
Para Alcón, “el problema con el que se encuentran las universidades es que el profesorado una vez acreditado por parte de la Agencia nacional de evaluación de la calidad y acreditación (ANECA) a alguna de las figuras contractuales o funcionariales se encuentra con que su derecho a la promoción no queda garantizado”.
En resumen, ha subrayado que “el profesorado contratado ve en peligro el desarrollo de su carrera docente e investigadora, mientras que al profesorado titulado acreditado a catedrático se le impide la promoción interna, a diferencia de lo que sucede en otros cuerpos del Estado”.
