Blanquerías ordena parar todas las negociaciones en los ayuntamientos

El hipotético tripartito autonómico (PSPV-Compromís-Podemos) ha escrito un nuevo capítulo digno de serial. Blanquerías acaba de dar la orden a sus secretarios comarcales de que paren las máquinas. Hasta nuevo aviso, se suspenden todas las negociaciones para alcanzar acuerdos en gobiernos locales.

La actitud de Mónica Oltra, única negociadora en nombre de la Coalició Compromís, está produciendo hartazgo y cansancio en el equipo capitaneado por Ximo Puig y compuesto, además, por Alfred Boix y José Manuel Orengo.

En la reunión mantenida esta mañana entre los tres partidos, no se ha abierto el tarro de las esencias, es decir, no se ha discutido si la Generalitat debe liderarla Ximo Puig o Mónica Oltra. Simplemente, se han abordado los famosos cinco puntos sobre los que pivotará el posible acuerdo. Y se ha encallado: Oltra exige un desarrollo pormenorizado de los ejes programáticos: plan de choque contra la pobreza y a favor del rescate de personas, la lucha contra la corrupción, el cambio de modelo productivo, auditoría y financiación autonómica, y reflotar los servicios públicos.

El líder de Podemos, Antonio Montiel, no ha secundado la actitud más combativa de Oltra, sino que se ha mostrado abierto a un diálogo que permita constituir un gobierno autonómico de izquierdas que sustituya al popular de los últimos 20 años.

Como se recordará, a finales de la semana pasada, Blanquerías trasladó optimismo para anunciar fumata blanca al mismo tiempo que se constituyera la Mesa de les Corts, el próximo 11 de junio. En aquel momento, el Bloc hizo saber que Oltra no era el todo en la negociación y, de hecho, se desactivó la marcha convocada el viernes para fortalecer las opciones de la lideresa como presidenta de la Generalitat Valenciana. Y es que los socialistas dieron un golpe encima de la mesa, recordando que en el hemiciclo hay representados más partidos con los que podrían formar gobierno (Ciudadanos), siempre y cuando la bancada popular se abstuviera.

El Bloc reaccionó y mostró su apoyo a que Puig presidiera el Consell, como fuerza política de izquierdas más votada, con cuatro escaños más que la formación de Oltra.

A cambio, el PSPV se comprometía a apoyar a Compromís en todas las localidades donde hubiera sido la lista más votada.

Pero hoy volvemos al punto de partida. Y es que Oltra es experta en romper acuerdos. Ya lo hizo cuando saltó por los aires el suscrito ante notario en 2007 entre EU, Els Verds, el Bloc e Izquierda Republicana para concurrir como coalición a las elecciones autonómicas de 2007. Los representantes del Bloc, liderados por Oltra, no mantuvieron los compromisos adquiridos con EU. En aquel momento, Oltra, a sueldo de EU desde 1987 como asesora de la Diputación de Valencia, fue expulsada de su partido junto con su actual compañera Mireia Mollà.

Continuará…