El PSPV emplaza al Consell a que haga públicos los datos de usuarios de bibliotecas tras los recortes autonómicos

El portavoz socialista de Cultura, Juan Soto, ha emplazado al Consell a que haga públicos los datos de usuarios de bibliotecas públicas durante 2012 después de que se llevara a cabo la aplicación de los recortes por parte de la Generalitat en ese mismo años. Al respecto, ha señalado que en enero de 2012 la Conselleria de Cultura publicó a través de una nota “triunfalista” los datos correspondientes a 2011 en la que hacía hincapié en el incremento de visitas en casi un 40%, en el caso de la Biblioteca de la calle Hospital de Valencia. Para Soto, es “sospechoso” que a mediados de abril, el Consell no haya hecho públicos los datos de 2012, por lo que se ha preguntado “qué tendrá que ocultar” y “en qué medida la reducción de horario de atención al público ha podido repercutir en el número de visitantes”. Por ello, el diputado espera que mañana en Les Corts se puedan conocer estos datos y la respuesta a sus preguntas.

El parlamentario ha considerado que las bibliotecas provinciales gestionadas por la Conselleria de Educación, Cultura y Deportes deberían mantener el horario de apertura al público de manera ininterrumpida ya que es “un servicio público de prestación imprescindible”. Para ello, pide que se aplique “el supuesto de excepcionalidad” previsto en el punto 5 del artículo 3 del decreto 1/2012, de 5 de enero, de medidas urgentes para la reducción del déficit en la Comunitat Valenciana, lo que supondría mantener la jornada y el sueldo de su personal interino, que en la Biblioteca del Hospital representa el 30%.

Soto, que ha explicado que esta propuesta contemplada en una proposición no ley se debatirá mañana en la Comisión de Educación y Cultura en Les Corts Valencianes, ha afirmado que es “un ejercicio de cinismo político” presentar un plan de fomento de la lectura y reducir el horario de una biblioteca que supera los 565.000 visitantes en 2011 (un 38% más que en 2010). En este sentido, ha concretado que son más de 2.000 los usuarios que acuden diariamente a esta instalación los que se ven afectados por unos recortes aplicados que hacen imposible que el personal de la biblioteca pueda atender en el horario ininterrumpido de 9 a 20 horas. Una situación que padecen también miles de ciudadanos en otras ciudades de la comunidad que tienen que abandonar los centros al mediodía de manera arbitraria e injustificada generando un profundo malestar.

Soto ha manifestado que esta actuación significa un “menosprecio” al papel insustituible de servicio público que tienen las bibliotecas públicas ya que son un recurso fundamental para acceder a los libros o a la información que les ofrece Internet a miles de ciudadanos, especialmente en tiempos de crisis. Por eso, ha lamentado la “insensibilidad demostrada” por la conselleria ante los efectos tan perjudiciales para todos los usuarios ya que se ha reducido en una cuarta parte el horario de apertura en Valencia y otras ciudades de la comunidad.

Por todo ello, ha considerado preciso que, mientras no se resuelva de manera definitiva la situación, se aplique la medida que contempla el decreto que el Consell promulgó en enero de 2012 para mantener con carácter excepcional la jornada y retribuciones del personal interino en supuestos imprescindibles, ya que, según ha recordado, “las bibliotecas son un servicio público básico de prestación imprescindible”, tal y como se hace en gran parte de Europa. “Sólo desde la arbitrariedad se puede atentar contra el derecho de acceso a un servicio cultural básico”, ha agregado Soto.

Por otra parte, ha señalado la contradicción del PP, ya que el grupo popular en Les Corts ha presentado una proposición no de ley para la promoción de la lectura que hace hincapié en el papel fundamental de las bibliotecas y las agencias de lectura públicas para consolidar y aumentar los índices de lectura por habitante.