Ximo Puig convoca a los valencianos y valencianas al “cambio real para sacar a la Comunitat del atasco en el que está”

El secretario general del PSPV-PSOE, Ximo Puig, ha convocado hoy a los valencianos y valencianas al “cambio real para sacar a la Comunitat Valenciana del atasco en el que está”. Un cambio para el que. según Puig, es “imprescindible unir a los valencianos a través del pacto y de la cohesión social”. En estos términos se ha expresado Puig durante la conferencia que ha impartido como ponente de la Tribuna Mediterránea en el Fórum sobre Europa que ha organizado Nueva Economía Forum.

En primer término, el secretario general del PSPV ha agradecido al director de Nueva Economía, José Luís Rodríguez, que haya promovido un espacio de debate “tan necesario” en la Comunitat; y también al exconseller de Economía con el PSPV, Aurelio Martínez, “el ejemplo de su trabajo serio y riguroso como gestor público”. Al respecto, ha remarcado que Martínez dejó las cuentas de la Generalitat con un endeudamiento del 6% frente al más del 20% actual.

Puig, que ha expuesto su análisis sobre la situación política, social y económica de la Comunitat, ha manifestado en primer lugar que “los valencianos tenemos todas las condiciones para estar entre las regiones más avanzadas de Europa” pero que no es así por “cinco graves losas”. La primera, la ingente deuda acumulada en tiempos de crecimiento, una hipoteca de 85.000 millones (seis veces el presupuesto de un año, el 84% del PIB valenciano); la segunda, la pérdida de imagen en el escenario nacional e internacional, “en los que piensan que no sabemos administrarnos, que derrochamos, que somos corruptos, que no pagamos impuestos, en definitiva, que nos somos de fiar”, ha lamentado; la tercera, la pérdida de nuestro sistema financiero; la cuarta, la ausencia de un modelo productivo sensato y sostenible; la cuarta, un paro insostenible, con una tasa dos puntos por encima de la media española, con casi un 50% de tasa de paro para los jóvenes valencianos. Al respecto, Puig ha hecho hincapié en que “ni toda la responsabilidad de cómo estamos es de la crisis, ni toda la responsabilidad es de los de fuera”, ya que “estamos peor que otros territorios que sufren la misma crisis”. Además, Puig ha sostenido que “una parte de lo que hemos perdido estos años no se puede medir en indicadores económicos o financieros. Es más grave, hemos perdido nuestro proyecto de convivencia, de Comunitat”

Ante esta situación, Puig ha propuesto “un nuevo proyecto, un cambio real” que supone “el reinicio de nuestro autogobierno”. Para conseguirlo, ha esbozado las tres líneas estratégicas necesarias: cambiar la forma de hacer política para revitalizar la democracia y que los ciudadanos confíen en sus instituciones; transformar el modelo productivo para fortalecer las empresas, crear empleo y cimentar el Estado de Bienestar; y que la Comunitat recupere en España el papel que le corresponde. Para todo ello, “es imprescindible unir a los valencianos, a través del dialogo, a través del pacto y de la cohesión social”, ha argumentado.

Reacción Democrática

En cuanto a la forma de cambiar la política, Puig ha anunciado la propuesta ‘Reacción Democrática’ que están impulsando los socialistas valencianos basada en tres puntos: transparencia y lucha contra la corrupción, reforma de los partidos políticos y ‘reconversión institucional’. Sobre la transparencia y la lucha contra la corrupción, ha insistido en que “democracia y corrupción son radicalmente incompatibles” y ha alertado sobre las responsabilidades políticas de quien protege o ampara la corrupción, así como de consecuencias morales y económicas para la sociedad.

El líder socialista ha recordado que el PSPV presentó recientemente un Pacto por la Transparencia, con diez antídotos contra la corrupción al que se comprometen a aplicar tanto en las instituciones como en el partido. Entre otras medidas, contempla el hacer públicas la renta y el patrimonio de todos los cargos socialistas, firmar ‘Pactos Empresariales por la Integridad’ entre las administraciones y sus contratistas, impulsar una ley para la protección del denunciante de prácticas corruptas e ilegales y eliminar los privilegios del aforamiento o alargar los plazos de prescripción.

En cuanto a la reforma de los partidos políticos, Puig ha apostado por una ley de partidos que obligue a realizar primarias abiertas, listas desbloqueadas y una financiación en la que las donaciones empresariales estén prohibidas. Sobre la ‘reconversión institucional, ha dicho, que después de 30 años de una arquitectura democrática diseñada en la transición, “no se puede demorar por más tiempo” la reforma del Senado, ni el debate sobre la supresión de las diputaciones, la reforma de la administración periférica del Estado o la eliminación de delegaciones territoriales de la Generalitat.

‘Modelo productivo y empleo’

En la segunda línea estratégica para propiciar el cambio real en la Comunitat, Puig se ha centrado en la reforma de nuestro modelo productivo con el objetivo de crear empleo y garantizar el Estado de Bienestar. Al respecto, ha reiterado que “ningún discurso servirá, ningún proyecto se podrá aplicar si no hay crecimiento económico. Para salir del “atasco”, Puig ha propuesto impulsar un “salto innovador” en los sectores tradicionales, potenciar los Institutos tecnológicos, incrementar la relación entre la empresa y las universidades, la refundación del IVEX, la creación de un Banco Público para Pymes, la modernización del sector agroalimentario y la cogestión en el turismo junto a los empresarios. Además, ha apostado por el apoyo de “forma prioritaria” a los nuevos emprendedores, por promover una “economía de corresponsabilidad” y una administración “cooperadora”. Al respecto, ha manifestado “quiero una administración que no sea arrogante. No quiero una Generalitat que cuando los farmacéuticos protestan para exigir que se les pague responda con amenazas. Ni que desprestigie a los funcionarios, a los profesores, al personal de la sanidad o a los dependientes cuando reclaman sus derechos”. Así, ha señalado, “creo en una administración que trabaje con los valencianos y no contra los valencianos”.

“Grave miopía” de España

En cuanto a cambiar la relación de la Comunitat con España, Puig ha lamentado la “resignación” de la Comunitat para no participar en los “debates importantes”, lo que ha considerado una “debilidad que tiene sus consecuencias económicas” negativas, como ha sido el caso de los últimos presupuestos del Estado. Igualmente, ha asegurado que “el modelo de financiación autonómica se ha convertido en un sistema de discriminación masiva hacia los valencianos”.

En esta línea, ha subrayado la “grave miopía” de España al no haber priorizado la inversión del Corredor Mediterráneo al mismo tiempo que ha manifestado su apoyo a los empresarios valencianos que se reunieron en Tarragona la semana pasada para reivindicar esta infraestructura y a “todas las iniciativas que se produzcan en esta dirección”. Además, ha defendido el impulso de la Eurorregión mediterránea en materia de financiación, de infraestructuras y defensa de la economía real. Por todo ello, el dirigente socialista ha reiterado que “los valencianos estamos exhaustos de ‘ofrendar glorias’ a España”, y ha reclamado un “trato desde la igualdad”.

Pacto social

Finalmente, Puig ha reiterado su propuesta de un “gran pacto social”, porque “lo importante es crear empleo y una distribución justa de los costes de la crisis”; y porque “lo están pidiendo los ciudadanos”. Así, ha dicho que “de nada sirve seguir con las mismas políticas y con los mismos protagonistas del pasado y esperar un resultado diferente”. Por eso, Puig “desde la convicción”, ha hecho un llamamiento al cambio.