Muzzati: “UPyD ayudará a Fabra a buscar soluciones para salir de la crisis, no para esconder las vergüenzas del Consell”
El coordinador territorial de Unión Progreso y Democracia en la Comunitat Valenciana, Romain Muzzati, afirma que su formación está dispuesta a ayudar al nuevo president de la Generalitat a “buscar soluciones para salir de la crisis, darle la vuelta a la desorbitada cifra de paro, mejorar los métodos de gestión pública con medidas austeras y atajar para siempre la imagen corrupta que se ha instalado en nuestra tierra, pero nunca para esconder las vergüenzas del Consell”.
Muzzati asegura, tras escuchar atentamente las palabras de Alberto Fabra en el debate de investidura, que “es hora de que todos los partidos arrimemos el hombro y dejemos atrás la crispación de los últimos años. Eso sí, la legitimidad de las urnas que hereda, como ya lo hizo al convertirse en alcalde de Castellón por primera vez, no le permite obstaculizar la acción de la justicia, minar la transparencia y la publicidad de los contratos administrativos y menoscabar la información veraz y ecuánime de los informativos de Radiotelevisión Valenciana”.
"Es de agradecer, francamente, que Fabra haya cruzado la línea defensiva en la que se había instalado Camps para tender puentes con la oposición y ofrecerse a hablar con todos los colectivos relevantes de nuestra sociedad, empezando por las víctimas del accidente de metro de 2006", sostiene Muzzati, quien añade que "un president de Castellón debe ayudar a superar el caduco provincianismo que limita el normal desarrollo y bienestar de nuestros vecinos".
Para la formación magenta, si de verdad Fabra quería desmarcarse de la gestión de Camps, debería haber evitado llamarle, de nuevo, ‘Molt Honorable’, porque una persona que miente al juez y a los valencianos no merece tener tan alto tratamiento protocolario. UPyD va a otorgar cierto margen de tiempo para que el nuevo inquilino de la Generalitat atienda sus prioridades y fragüe su equipo de la mejor manera posible.
"No queremos a un president hipotecado ni maniatado, como le pasó a Camps en su primera legislatura, ya que sería horrible, de nuevo, que se produjeran luchas cainitas entre las filas del PP, antes con Alicante, con las familias zaplanistas y ripollistas y ahora, con Castellón. Nuestra tierra no se merece un gobierno que riña constantemente, pero los valencianos tampoco nos merecemos un president de la Generalitat que ha dejado la ciudad de Castellón, donde gobernaba, con más del triple de parados. Es evidente que esta no es su mejor carta de presentación. Su afabilidad y buenas maneras ayudan, pero no son suficientes para llevar la vara de mando con tino", concluye Muzzati.
