Expropiación del Colomer-Zurita: inicio de un nuevo futuro para la cultura y la educación de los morellanos
Desde el Ayuntamiento de Morella, se dejó constancia en el pleno del día de ayer, de que esta es una decisión dolorosa, pero no hay más remedio que adoptarla, para que el edificio no se desplome. Esta decisión viene precipitada por las distintas actuaciones que el ayuntamiento ha tenido que llevar a cabo para evitar posibles accidentes. Desde hace un tiempo, están cayendo tejas desde diez metros de altura, por lo que se ha instalado un perímetro de protección alrededor del edificio y se han tapiado algunas puertas, para evitar el acceso al centro. El consistorio podría detener este expediente si la Generalitat atiende a la petición de cesión, que tantas veces se ha formulado.
Según Ximo Puig, alcalde de Morella, “la Generalitat ha requisado a los morellanos un edificio querido y nuestro, sólo para evitar que el Ayuntamiento haga el proyecto. Hace muchos años que desde el Ayuntamiento se instauró la institucionalización de la fundación Colomer-Zurita pero la Generalitat lo impidió por razones sectáreas. Estamos seguros que si estuvieran aquí los fundadores de la Colomer-Zurita, preferirían antes la opción de hacer un proyecto cultural y educativo, que dejarla caer”. Respecto a la inversión que hay que acometer para la expropiación, añadió “que el dinero que invierta el Ayuntamiento quedará en el debe de la Generalitat y esperemos que se tranforme en inversiones, ya que es de todos los habitantes de Morella”.
El objetivo es que el edificio Colomer-Zurita se pueda rehabilitar y convertir en un centro cultural. Se sacó a concurso el proyecto y se presentaron arquitectos venidos de toda España. Al final, atendiendo a los baremos pertinentes, el proyecto se adjudicó a uno de ellos. En este proyecto se encuentran, entre otros, los siguientes espacios destinados a ámbitos culturales: una sede universitaria, un centro de congresos, una biblioteca en condiciones, una filmoteca o un auditorio. Ximo Puig añadió durante el Pleno que “queremos un colegio para que no caiga y hacer un proyecto de futuro. La expropiación es el único camino para salvar el edificio y hacer posible un gran proyecto cultural, universitario y de promoción económica. Con la A-68 y el Parador, hay perspectivas de futuro y, por eso, ahora es el momento de asumir riesgos”.
Ximo Puig, también instó al Partido Popular de Morella a apoyar está decisión, ya que es un “proyecto cultural muy potente para los morellanos”. Así, también explicó que “el equipo de Gobierno del Ayuntamiento podría quedarse en la crítica al abuso y la desidia del PP. Podríamos criticar y criticar, pero el edificio continuaría cayendo. Nuestro compromiso con Morella va más allá. Estamos transformando Morella en positivo y, eso, exige ambición, coraje y asumir el riesgo desde la convicción y el esfuerzo permanente. Siempre mirando hacia delante”. Sin embargo, el PP, optó por enviar una nota de prensa a la hora del Pleno, en la que expuso argumentos contrarios al Colomer-Zurita, que no explicaron durante la sesión.
Por último, en la sesión del Pleno de ayer, el alcalde de Morella también habló de los proyectos que la Generalitat Valenciana ha asumido y después ha dejado en el olvido, como la escuela de deportes de montaña de la Fábrica Giner. También, se hizo referencia a las promesas incumplidas, como el hospital, el balneario o dinomanía y a la deficiente gestión que se está llevando de las pinturas rupestres de Morella la Vella.
