Montón: "La Conselleria de Sanitat cuenta por fin con su primer Plan de Igualdad, tras nueve años de espera"
La consellera de Sanitat Universal i Salut Pública, Carmen Montón, ha acordado hoy con los sindicatos el primer Plan de Igualdad en el ámbito sanitario nueve años después de la aprobación de la Ley Orgánica 3/2007 para la Igualdad efectiva de mujeres y hombres, que recogía la necesidad de elaborar planes de igualdad en las administraciones públicas, y el Estatuto Básico del Empleado Público, que obligaba a ello.
Montón, que ha firmado el texto del Plan de Igualdad con los representantes de las organizaciones sindicales presentes en la Mesa Sectorial de Sanidad, ha mostrado su satisfacción por poder contar con un plan consensuado y de aplicación en todo el sector público sanitario valenciano con una plantilla de más de 50.000 personas, "porque ese retraso no era sostenible", ha dicho.
El Plan de Igualdad contiene un total de 78 medidas consensuadas en la Comisión de Igualdad que echó a andar en el mes de septiembre y en la que se integran, de forma paritaria, representantes de la Administración y de las organizaciones sindicales. Además, ha contado para su elaboración con las aportaciones realizadas por el conjunto de la plantilla a través de la intranet de la conselleria.
El plan parte de un diagnóstico que muestra una plantilla muy feminizada. En concreto, el 73,6% de los trabajadores del sistema público sanitario son mujeres, si bien la cifra se dispara hasta el 95,8% en la categoría de auxiliar de enfermería, y hasta el 82,3% en enfermería. Sin embargo, en el personal directivo sanitario, sólo el 48,9% son mujeres.
En el caso del personal facultativo, está más equilibrado. De hecho, el 53% de los médicos con que cuenta la sanidad pública valenciana son mujeres. Ahora bien, sólo el 18,8% de ellas ocupa una jefatura de servicio. El 81% de los jefes son hombres.
De ahí que uno de los principales objetivos del Plan de Igualdad sea precisamente aumentar la presencia de mujeres en puestos directivos, "para romper la inercia social de designar a hombres en estos puestos", ha explicado Carmen Montón.
En este sentido, se indicará en las convocatorias de selección y provisión si existe infrarepresentación de alguno de los dos sexos (cuando alguno de los sexos tenga una presencia inferior al 40%) para lograr una presencia equitativa de mujeres y hombres.
Además de formar en igualdad de género y realizar campañas de corresponsabilidad familiar dirigidas especialmente a los hombres, se promoverá la formación en nuevas tecnologías para disminuir la brecha digital de género, se aumentará la presencia de mujeres en la investigación sanitaria. La evaluación de los riesgos laborales tendrá en cuenta las variables relacionadas con el sexo y se contemplará la adaptación o el cambio de puesto ante una situación de embarazo o periodo de lactancia natural.
El Plan de Salud prevé que se facilite que el derecho a la exención de guardias sea retribuido durante el embarazo, el permiso maternal y el permiso por lactancia.
Protección a las víctimas de la violencia de género
Además de garantizar la rapidez de actuación en la protección a la víctima de violencia de género, el plan contempla que, ante un traslado de centro por este motivo, la afectada tenga derecho a la reserva del puesto de trabajo de origen, hasta dos años.
Se impulsará el protocolo para la atención sanitaria de la violencia de género en centros de salud y hospitales, y se formará al personal sanitario en la prevención, detección precoz y atención integral de la violencia de género.
Otra de las medidas está encaminada a prevenir el acoso sexual. Así, se elaborará un protocolo para la prevención, detección y resolución de las situaciones de acoso sexual por razón de sexo, orientación sexual o identidad de género.
En materia de conciliación, se impulsará una cultura de corresponsabilidad en el reparto equilibrado de tareas entre ambos sexos, se potenciará entre los hombres el ejercicio de los derechos que tienen reconocidos en este sentido (como el permiso de lactancia aunque la mujer no trabaje), se ampliarán los supuestos de permiso por cuidado de menores o personas a cargo que requieran especial atención, así como la exención de guardias por el mismo motivo.
La idea también es fomentar un uso racional de los tiempos mediante flexibilización de horarios, evitar el impacto negativo de la conciliación en la carrera profesional y las posibilidades de promoción, posibilitar la movilidad por razones de salud de familiares o permitir el permiso restribuido de mujeres embarazadas a partir del la semana 37 o la 35 en caso de gestación múltiple.
