El Registro Civil de Mislata vive una jornada límite por falta de recursos de la Generalitat
El alcalde, Carlos Fernández Bielsa, ha exigido hoy a la Generalitat Valenciana que disponga más medios para agilizar la gestión de los Juzgados de Mislata. El Registro Civil del municipio solo dispone un día al año (mañana) para tramitar la nacionalidad, «una situación de precariedad administrativa indigna para esta oficina que repercute en un área de 73.000 habitantes».
No es novedad que los Juzgados de Mislata sufran colapso. Tanto ciudadanos, como los trabajadores y el propio alcalde, han denunciado en múltiples ocasiones la falta de medios y de condiciones para disponer de una gestión eficiente. El alcalde envió una carta al Director General de Justicia para reunirse y tomar determinaciones, pero no hubo respuesta por parte de la Consellería.
Hoy está viviéndose el ejemplo palpable del caos y de la falta de recursos del Registro Civil de Mislata. Centenares de personas hacen cola en la oficina que reparte números de cita previa para solicitar la nacionalidad, porque mañana es el único día del año que se podrá tramitar. En estas condiciones, se han formado colas de espera interminables en la calle, hay gente que se han llevado sillas para soportar la espera y los trabajadores del centro no dan de más de sí.
En otros municipios, como Valencia, Sagunt, Castellón, Benidorm o Torrent, los trámites de extranjería y nacionalidad se pueden hacer diversos días al año o incluso solicitar la cita previa y gestionar documentación on-line a través del portal de la Generalitat. Pero en Mislata, según ha explicado el alcalde, «nos han dejado abandonados desde hace más de una década, estamos como en el siglo XX, sin recursos humanos, materiales, ni informáticos para lograr una gestión eficiente y mínimamente resolutiva de los expedientes de nacionalidad de Mislata».
La solicitud de cita previa en el Registro Civil de Mislata es únicamente presencial y el trámite solo está permitido realizarlo un día al año, con lo que centenares de personas han de esperar, en la mayoría de los casos, varias horas para que les atiendan. Muchos de estos ciudadanos han denunciado su malestar ante la Generalitat y el propio ayuntamiento.
Actualmente, los expedientes permanecen en cajas durante meses. El espacio es inadecuado y el personal está muy limitado para dar salida a un área que incluye a los vecinos de Xirivella, y que engloba a más de 73.000 habitantes.
