Manises acoge a ocho niños palestinos, dentro del programa Vacaciones para la Paz 2010

Lo han pasado en grande e incluso han aprendido a nadar. Toda una experiencia que nunca olvidarán ocho niños palestinos, de entre 10 y 12 años de edad, que han tenido ocasión de disfrutar de una semana en Manises, gracias al programa Vacaciones por la paz que promueve la ONG Paz Ahora con el objetivo de la integración de culturas y la educación en valores de niños y adolescentes que han sufrido en primera persona conflictos bélicos.

En total son 54 niños palestinos de campos de refugiados de Cisjordania y Gaza los que han venido a España este verano para, distribuidos en grupos en seis Comunidades Autónomas, tener ocasión de participar de actividades que buscan la educación por la paz. A la Comunidad Valenciana han venido cinco niños y tres niñas que han simultaneado su estancia en Manises con la visita a la ecoaldea Madre Tierra, en Xiva, y a Albal, municipio donde han realizado talleres de relajación.

Aquí en Manises, el Consistorio que dirige Enrique Crespo ha brindado a los niños, a través de su Fundación Municipal de Deportes, la oportunidad de disfrutar de las instalaciones deportivas municipales y realizar en ellas diferentes actividades lúdicas y deportivas. Ellos, acompañados por la vicepresidenta de Paz Ahora, Marisa Tejada, por varios responsables de la ONG y por el traductor Ameer Masri han podido aprender a nadar en la piscina municipal de verano. "Lo han pasado muy bien, porque cotidianamente viven experiencias de mucha tensión, presión y miedo y en Manises han tenido la oportunidad de aprender la natación, ver por primera vez el mar en Valencia e ir todos los días a la piscina. Los niños han sido muy felices y están enamorados de esta tierra".

Los pequeños también han realizado excursiones a la capital, donde han visitado la Ciudad de las Artes y las Ciencias o el parque Gulliver. El alcalde de Manises, Enrique Crespo, ha valorado muy positivamente estos programas y ha destacado que "mediante actividades lúdicas y educativas, los niños han podido vivir en nuestra ciudad una experiencia pedagógica e intercultural muy gratificante y disfrutar de una auténtica convivencia, trabajando por algo tan importante como es la educación por la paz y consiguiendo que pasaran unos días felices ".

Ahora los ocho niños volverán a Madrid para, desde ahí, ir a Marinau (en Granada), donde estarán hasta el 29 de julio. Luego volverán a Madrid, donde estarán una semana y donde se reunirán con los otros niños que participan del programa para todos juntos intercambiar experiencias.