Manises contará con una nueva unidad de cuidados críticos postquirúrgicos con atención 24 horas
Atenderá a enfermos con postoperatorios complejos que necesiten cuidados avanzados y cuyas estancias no superen las 72 horas
El nuevo servicio de reanimación postquirúrgica ha supuesto una inversión de casi 50.000 euros y cuenta con una superficie de 165 metros cuadrados
Según explica Eva Romero, jefa del Servicio de Anestesia y responsable de la nueva unidad médica, “la incorporación de la REA a la cartera de servicios de Manises supondrá un aumento de la oferta de cuidados críticos postquirúrgicos, así como la mejora en la atención continuada a los pacientes que, por las características específicas de su dolencia, requieren de una atención, monitorización o cuidados más rigurosos en el postoperatorio inmediato”.
Así, la REA atenderá a pacientes quirúrgicos que por su situación clínica de base así lo requieran o que son sometidos a intervenciones de mayor complejidad como son la cirugía cardiaca, cirugía vascular, cirugía general, etc. “La REA está dirigida a pacientes que requieren cuidados críticos, por eso estarán atendidos en todo momento por a un equipo de profesionales especialmente capacitado que les proporcionará una asistencia continuada las 24 horas del día”, explica la doctora Romero.
Hasta ahora este tipo de pacientes eran atendidos por la UCI (Unidad de Cuidados Intensivos), pero la mayor actividad de esta última y la ampliación de la cartera de servicios del centro con la incorporación de especialidades quirúrgicas complejas, como es caso de la cirugía cardiaca, han motivado la apertura del nuevo servicio de REA.
Infraestructuras e inversión
La unidad de cuidados críticos postquirúrgicos, cuya inversión ha supuesto un total de 49.455 euros, cuenta con una superficie de 165 metros cuadrados y estará ubicada en la tercera planta del Hospital de Manises, junto al bloque quirúrgico y la Unidad de Recuperación Post Anestésica.
La nueva REA ha sido dotada con cuatro boxes individuales, provistos de un sistema de separación hermético para mantener aislados a los pacientes y de un completo equipamiento entre los que se cuentan seis respiradores, seis monitores y el equipo de anestesistas, enfermeras y auxiliares que trabajarán a diario para atender a los 600 pacientes que se estima pasen por la sala al año.
