El Ayuntamiento acondiciona la Senda del Quistel
La actuación también conlleva la instalación de bancos, mesas, papeleras y paneles informativos sobre el entorno
El Ayuntamiento de la Vall d'Uixó ha empezado los trabajos en la Senda del Quistel para acondicionar y poner en valor la única senda periurbana que tiene la ciudad y que está situada en el margen derecho (siguiendo la corriente) del barranco de Sant Josep y es el inicio de la ruta PRV-241, que llega a la cumbre de Pipa. La senda recorre un bosque típicamente mediterráneo muy frondoso, con muchas especies vegetales típicas de estas formaciones, entre las que destacan muchos algarrobos centenarios.
En los últimos años, esta zona ha sufrido una grave deterioro debido a la falta de actuaciones y del paso del tiempo. Por eso, desde la Concejalía de Medio Ambiente “hemos decidido hacer una serie de mejoras para volver a ponerla en valor y hacerla un espacio más atractivo y pedagógico para aquellos que vayan a verla”, ha señalado el concejal del área, Jordi Julià.
En esta primera fase de trabajos se han quitado todas las plantas y ramas muertas, se han reparado y vuelto a levantar los ribazos que dan a la senda y que habían caído, se han retirado las plantes invasoras de la zona y se ha puesto una valla de cañizo en la parte más elevada para evitar caídas, que encaja perfectamente con el paisaje. “Más adelante se instalarán bancos, mesas y papeleras a lo largo de todo el recorrido para que los visitantes puedan disfrutar tranquilamente”, ha afirmado el edil.
Además se instalarán varios paneles informativos sobre las plantas del entorno, que explicarán los usos tradicionales de estas especies, su distribución y el ambiente en que viven así como la época en que las podemos encontrar florecimientos. Por lo tanto, esta remodelación “también tiene un carácter pedagógico y educativo en valores ambientales, y servirá como punto de partida para varias actividades que se pueden hacer en ella”, ha avanzado.
Para finalizar, Julià ha destacado que durante los meses de otoño se plantarán plantas autóctonas para repoblar la Senda del Quistel y que “vuelva más o menos a su estado original, mucho más verde que en la actualidad”.
