Jorge pide que se aclare si las dimensiones del campo de fútbol II del José Magriñán están homologadas para la categoría juvenil
El concejal del Grupo Municipal Socialista Manel Jorge ha pedido al alcalde, Óscar Clavell, que aclare si las dimensiones del campo de fútbol II del estadio José Magriñán están homolagadas para que puedan, allí, disputarse partidos oficiales de la categoría juvenil.
Esta petición llega a partir de la contradicción expresa entre el propio Clavell y el concejal de Deportes, Víctor Lorenzo. Mientras que el primero aseguró en pleno que las instalaciones están homologadas, el segundo dijo en comisión informativa lo contrario.
Así, el edil socialista ha explicado que tanto en pleno como en comisión se solicitó información sobre la forma más constructiva possible: “Estamos contentos por la instalación del cesped en el campo de fútbol pero llegó la preocupación de algunos usuarios porque el nuevo proyecto no podria homologarse por sus dimensiones para los partidos de la categoría juvenil”.
“En pleno explicamos que no era la intención ni hacer crítica ni enfrontar a nadie pero que se debería repensar el tema de la mejor manera possible si era cierta la información, puesto que la inversión es muy grande y es necesario asegurar el uso satisfactorio de la misma, en el presente y en el futuro”, ha añadido.
Jorge ha explicado que la respuesta de Lorenzo en comisión fue que “no tendríamos la homologación y que él mismo no era partidario de esa decisión”. Ante esta respuesta, se trasladó pregunta al plenario y la respuesta del alcalde fue que “sí que estaban homologados, y ante la extrañeza de la respuesta, Clavell se reafirmó incluso ante la estupefacción del concejal de Deportes, al que acusó de estar equivocado”.
Por esto, el concejal ha pedido “claridad, que digan si se podrá, o no, homologar el campo de fútbol para competiciones juveniles y, cuando contesten, se reflexionará para buscar la mejor solución en caso de que sea que no”.
Con todo, Jorge ha reiterado, una vez más, la denuncia del “autoritarismo y soberbia de Clavell, desacreditando y dejando en evidencia incluso a un concejal de su propio equipo de gobierno”.
