Humedades: un problema cada vez más frecuente en nuestras casas

Las humedades son, por desgracia, un problema cada vez más común en nuestro país, sobre todo, en la parte norte, desde Galicia hasta Cataluña. De hecho, se calcula que solo en la provincia de Barcelona, hasta un 85 por ciento de las viviendas presentan algún tipo de humedad. 

Lo cierto es que, más allá de la incomodidad que supone vivir en una casa afectada por la humedad, las humedades que pueden aparecer en los hogares son también un riesgo, por una parte, para la salud y, por otra parte, para la propia estructura de la vivienda. Es por eso que cada vez se desarrollan más y mejores soluciones especializadas en reparar las humedades por capilaridad en Barcelona, aplicando novedosas técnicas y herramientas de alto impacto que mejoran considerablemente la vida de las familias. 

Sea como sea, está claro que cualquier tipo de humedad supone una incomodidad más que notable. Por este motivo, en este artículo queremos aportar soluciones e información  de primera mano para que cualquiera pueda conocer, prevenir y solucionar las humedades de su hogar de manera sencilla. 

¿Cómo suelen surgir las humedades en una vivienda?

Las humedades que aparecen dentro de las viviendas y los locales comerciales están, a menudo, derivadas de algún tipo de factor externo: bien sea la propia construcción del inmueble o por cuestiones de climatología, lo cierto es que la gran mayoría de las casas de nuestro país son susceptibles de sufrir humedades en algún momento. 

Al margen de esto, está claro que no todas las humedades surgen únicamente por estos dos motivos. Así, en términos generales, se pueden dividir los tipos de humedades en tres grandes grupos, dependiendo del origen que las cause. 

Humedades por capilarización

Este tipo de humedades surgen a raíz de la existencia de aguas subterráneas que pasan muy cerca de las inmediaciones de las casas. En estos casos, normalmente existen pequeñas reservas de agua o manantiales en el subsuelo que terminan afectando a todo tipo de casas y edificios. Así, la humedad por capilarización se da también debido a un aislamiento poco trabajado, en el que el agua subterránea alcanza las estructuras a través de materiales de construcción con cierta porosidad, como pueden ser el cemento o los ladrillos. Este tipo de humedades suelen aparecer en la parte baja de las paredes, dando lugar a manchas, desconchones y moho en las paredes, con un fuerte olor a humedad. 

Humedades por condensación

Otro de los tipos principales de humedad son las humedades por condensación. En estos casos, los síntomas de la humedad aparecen debido a un alto índice de humedad ambiental dentro de la vivienda, que normalmente viene dado por un aislamiento deficiente, sobre todo, por parte de los materiales de construcción y la calidad de las puertas y ventanas. Así, suelen aparecer gotas de agua que terminan por deteriorar el interior de la vivienda y que provocan, en muchos casos, la aparición de moho y malos olores. 

Humedades por filtraciones

El último tipo de humedad más destacable es la que aparece cuando se dan filtraciones ajenas a la propia construcción de la vivienda. En estos casos, la aparición de la humedad se da cuando, por ejemplo, cuando una tubería no se encuentra en buen estado y filtra el agua del exterior desde el interior de las paredes del inmueble. Estas humedades son, quizás, las menos evidentes, ya que puede pasar cierto tiempo desde que aparece la filtración hasta que se dan los síntomas en el interior de la vivienda. Por lo general, este tipo de humedades suelen aparecer en forma de manchas en el techo, llegando incluso a ocasionar goteras. 

Cómo prevenir la aparición de humedades

Prevenir la aparición de las humedades es un trabajo que dependerá en gran medida del tipo de humedad que esté afectando a la vivienda. Por ejemplo, en el caso de las humedades por filtraciones, poco podemos hacer hasta que no aparezca algún síntoma en alguna parte de la casa. 

Sin embargo, en el caso de las humedades por capilarización y las humedades por condensación, las soluciones pueden ser más preventivas. En el caso de las humedades por capilarización, se pueden aplicar técnicas que eliminan de forma definitiva este tipo de humedad, como pueden ser los sistemas de ondas electromagnéticas. Estas ondas de baja frecuencia actúan directamente en los materiales de construcción, generando un rechazo de estos hacia el agua subterránea y contrarrestando sus efectos negativos en las viviendas. 

Por otra parte, la prevención de humedades por condensación se puede prevenir invirtiendo en una mejora del aislamiento de la propia vivienda, por ejemplo, con una renovación del tejado o con puertas y ventanas específicamente diseñadas para evitar que la humedad del ambiente se introduzca en la vivienda. 

Sea como sea, cuando las humedades ya son una realidad en una casa, la mejor alternativa para solucionarlas será siempre trabajar de la mano de un equipo profesional, especializado en este sector y que pueda aportar remedios técnicos y que verdaderamente contribuyan a conseguir resultados duraderos.