Godella ofrecerá 450.000 euros a las monjas, el primer año, por el parque de la Dehesa

«Las condiciones que nos impedían aumentar nuestra oferta siguen vigentes en la actualidad, por lo que no nos podemos separar de los criterios que expusimos en el Plan de Pagos que presentamos en enero de este año». Así advertía la concejala de Urbanismo y Medio Ambiente, Mª Dolores Sánchez, que la nueva propuesta, que esta misma tarde se presentará en el pleno ordinario para su aprobación, no podía diferir de los 200.000 euros anuales más un inmueble y parcelas valorados en 3,5 millones de euros ofrecidos en el anterior plan de pagos.

La exposición la realizó en una asamblea en la que el Ayuntamiento convocó a la ciudadanía para «informarla directamente, sin intermediarios, y antes que nadie, dada la gravedad de la situación», comentó el alcalde de Godella, Josep Manel San Fèlix quien acompañó en la tribuna a la concejala del Área y al abogado del consistorio, José Luis Noguera.

«No podemos acudir a la financiación externa porque la Ley de Estabilidad Presupuestaria de Rajoy nos lo impide, no podemos eludir los compromisos que tenemos con nuestro proveedores ni dejar de pagar a nuestros trabajadores, con lo que el 97,74% de nuestro Presupuesto ya está comprometido, nada de esto ha cambiado», recordó Sánchez. Con un escenario así, el equipo de Gobierno mantendrá la oferta pero incorporará una revisión anual para añadir el remanente de tesorería a la suma. «Hemos demostrado que somos capaces de gestionar bien este municipio, hemos cerrado todos los ejercicios que hemos gobernado desde 2007 con remanente positivo de tesorería y, del remanente positivo de la liquidación este año, se aportarán 250.000 euros que incrementarían la cifra del primer pago hasta los 450.000 euros», señaló la concejala de Urbanismo.

Sánchez realizó un breve resumen cronológico del caso y aseguró que el Expediente de Expropiación lo inició la Congregación y no el Ayuntamiento. También leyó públicamente el duro requerimiento de la jueza de la Sala, Laura Alabau, y la negativa de la Sociedad del Sagrado Corazón a reunirse, también, con el actual alcalde de la localidad, como ya hiciera con su predecesor, «hasta que dicha Sala no apruebe las bases de la negociación».

Ya en el turno de ruegos y preguntas, las respuestas del letrado del Ayuntamiento permitieron a las personas asistentes entender las consecuencias del proceso, las siguientes fases y eliminar dudas y «rumorología». «Lo más probable es que la Sala diga una cantidad y que pida a Intervención y a los técnicos la documentación e informes necesarios para determinar de dónde rascan el dinero que falte hasta llegar a dicha cantidad».

«Lo que es incuestionable para este equipo de gobierno es la prestación de los servicios que consideramos fundamentales como los servicios sociales, de educación, culturales, deportivos…», comentó Sánchez.

A la asamblea asistieron representantes de todos los partidos políticos del consistorio excepto del Partido Popular que ofrecieron su visión comprometida con la ciudadanía: «Nosotros estamos dispuestos a cumplir lo que diga la Sala pero no de cualquier manera ni a cualquier precio, no vamos a hacer nada para lo que no hemos sido elegidos y desde luego, no nos han elegido los ciudadanos para reducir su calidad de vida ni para prescindir de personal del Ayuntamiento –afirmó el concejal de Hacienda y portavoz del PSPV-PSOE, Salvador Soler–; ¿nos pueden obligar a subir el IBI?, no. ¿Pueden hacer que se suban los impuestos?, sí pero no con nuestros votos, antes, nos iremos».

Por su parte, la portavoz de Bloc-Compromís y concejala de Educación y Personal, Eva Sanchis ahondó en la posición institucional de «no despedir a nadie, de mantener los servicios sociales, de educación, cultura, deportes, esa es la posición que hemos adoptado desde el principio y la que vamos a defender hasta el final; no estaría mal que los que abogan por ejecutar la sentencia siguiendo los criterios de la jueza, explicaran también cómo iban a obtener esas cantidades, que dijeran a quién iban a tirar a la calle, cuánto iban a subir los impuestos y qué servicios iban a dejar sin prestar».

Desde el público también se lanzaron ideas que el grupo de gobierno se comprometió a estudiar como la fórmula que se utilizaría para recoger la voluntad del pueblo ya que «no haremos nada sin el aval de la ciudadanía en un problema de esta envergadura, y tendremos que analizar cómo se plantea, si en forma de consulta o de referéndum o cómo», aseguró Soler. El alcalde también aseguró que estudiarían otra de las propuestas de los asistentes y que consistiría en enviar a todas las casas una carta informativa en la que se les indique cuánto deberían pagar para en función del IBI.