El PSOE exige solucionar la urbanización de Casa Colorá "que impide a Huerta Nueva tener mejores comunicaciones"
El portavoz del grupo municipal socialista en el Ayuntamiento de Elda, Rubén Alfaro, ha exigido al equipo de Gobierno que dé una solución al plan parcial Torreta-Casa Colorá para que los vecinos de Huerta Nueva disfruten de unas mejores comunicaciones con el resto de la población.
Este plan parcial comenzó a urbanizarse a mediados del año 2007, y las obras concluyeron a finales de 2009, sin que hasta el momento el ayuntamiento haya recibido las obras y, por tanto, las calles puedan ser transitadas por vehículos y personas.
Los vecinos de Huerta Nueva han entregado al grupo socialista copia de las 500 firmas que los propios vecinos han recogido en el barrio pidiendo una solución, y el portavoz Rubén Alfaro ha anunciado la presentación e una moción en el próximo pleno ordinario.
Además, Alfaro ha lamentado la situación de este proyecto que, impulsado por el anterior equipo de gobierno socialista y que pretendía “mejorar Huerta Nueva, un barrio que hasta ahora está encajonado puesto que sólo tiene una única entrada y salida”, lamentando la “pasividad y falta de interés de la alcaldesa Adela Pedrosa por reclamar ante la empresa que ha llevado los trabajos que concluya las obras y las entregue al ayuntamiento para que puedan ponerse en uso”.
El concejal socialista ha indicado que “si el problema es que la empresa todavía no ha ejecutado las zonas verdes y demás equipamientos, el Ayuntamiento debe estudiar la posibilidad de quitarle la condición de agente urbanizador, incautándole el aval y ejecutando las obras de equipamiento pendientes”.
Las obras fueron iniciadas por la mercantil Dragados -perteneciente al grupo ACS que dirige el actual presidente del Real Madrid- y solicitó una modificación puntual del plan parcial que fue aprobada en febrero de 2010 para incrementar en 128 el número de viviendas. Con esta solicitud se pasaba de los 374 bungalows adosados de renta libre que tenía previsto construir entre el cauce del río, la Casa Colorá y el barrio de La Torreta, a edificios de cinco alturas y entresuelo con un total de 502 Viviendas de Protección Oficial (VPO), todo ello sobre una superficie de 52.256 metros, de los que 11.637 están destinados a uso terciario.
Alfaro ha pedido a la alcaldesa “contundencia” en este asunto que afecta a la calidad de vida de un barrio muy importante ya que “si a la empresa, por la crisis, no le es rentable la construcción de viviendas si tendrá que cumplir con el compromiso adquirido con el ayuntamiento y dotar de las zonas verdes y equipamiento estipuladas”.
