Cultura inicia el expediente para delimitar como zona arqueológica BIC el yacimiento arqueológico El Monastil de Elda
El Pleno del Consell ha sido informado de la incoación del expediente por parte de la Conselleria de Educación, Cultura y Deporte, para complementar la declaración de Bien de Interés Cultural, con la categoría de Zona Arqueológica, el yacimiento arqueológico El Monastil, ubicado en el término municipal de Elda, en Alicante.
En el entorno de protección queda incluido el poblado, formado fundamentalmente por viviendas de tendencia rectangular adaptadas a la orografía irregular del cerro distribuidas en torno a una calle central que se divide en dos viales hacia la parte del asentamiento, así como el sistema defensivo, del que se conservan varios tramos de la muralla del oppidum iberorromano con un espesor de tres metros, construida y apoyada sobre la pared rocosa natural del lugar.
También figura el conjunto doméstico y artesanal, del que destacan los restos de un almacén ibérico, así como los vestigios de una alfarería romana con tres hornos, y la Iglesia cristiana, construcción, expoliada desde antiguo, especialmente durante el periodo islámico emiral, que se asienta sobre estratos de la Edad del Bronce.
Además, se señalan, dentro del área delimitada de la propia Zona Arqueológica, dos bienes culturales de valor patrimonial: el Pozo de Agua del Canto Domingo como patrimonio etnológico y la casa de El Monastil o de Emérito Maestre, como patrimonio arquitectónico.
A lo largo de su historia, El Monastil ha mantenido una constante posición central en el corredor del río Vinalopó, y se ha constituido, dentro del valle de Elda, en un hito de frontera tradicional entre el Alto y Medio Vinalopó. Ha sido, igualmente, lugar estratégico para controlar las principales vías de comunicación históricas entre las comarcas centromeridionales costeras alicantinas y el interior de la Península Ibérica camino de la Meseta Central.
En conjunto, el yacimiento arqueológico muestra un relevante grupo de construcciones y vestigios materiales de los períodos calcolítico, Edad del Bronce, orientalizante, Ibérico, Romano, Tardoantiguo, Islámico emiral y, en menor medida, de las épocas califal y almohade.
