Alfaro pide a la alcaldesa que no permita que se sigan perdiendo líneas educativas en Elda
El portavoz del grupo municipal socialista en el Ayuntamiento de Elda, Rubén Alfaro, ha pedido a la alcaldesa que “no permita que la Conselleria de Educación que está gobernada por su mismo partido elimine cinco nuevas líneas educativas en Elda”, tal y como se ha conocido hoy en base al documento conocido como “arreglo escolar”.
Según las intenciones de la Generalitat se cerrará una unidad de Primaria del colegio Pintor Sorolla con la intención que pase de tres a dos líneas educativas en los cursos sucesivos, Miguel Servet pierde también una unidad de Primaria para que pase de dos líneas a una, y otra de Educación Infantil. Los centros Nuevo Almafrá y Miguel Hernández pierden cada uno una unidad de Educación Infantil.
Estos nuevos recortes en Elda provocará que en dos años la Generalitat cierre 14 unidades educativas de centros púbicos, sumando a las cinco que ahora se proponen las del cierre del colegio El Seráfico, mientras no sólo no ha recortado en la educación concertada sino que se ha incrementado.
Alfaro ha instado a la alcaldesa a “ponerse al frente de las reivindicaciones para frenar este despropósito”, y ha lamentado la deriva en la que ha entrado la ciudad “con una de las tasas de paro más elevadas, con pocas expectativas para comerciantes y emprendedores y con un evidente declive del sistema educativo público”.
El portavoz socialista ha pedido una “reacción contundente” y ha ofrecido “toda la colaboración del grupo municipal socialista para reivindicar juntos aquí o en Valencia lo que Elda y los eldenses merecen”.
No obstante el edil es pesimista respecto a lo que pueda hacer el equipo de Gobierno y su alcaldesa “a la que vemos de sarao en sarao, en el Ayuntamiento y en Diputación, pero que mira a otro lado cuando hay que defender los intereses de la ciudad”.
Los socialistas también han criticado las “formas” de la conselleria, ya que hay plazo de alegaciones hasta el 2 de enero, en plenas vacaciones de la comunidad educativa lo que pone de relieve “una estrategia oscurantista para desmantelar el sistema público educativo”.
Alfaro también ha mostrado su pesar porque “esto provocará masificación en las aulas, la pérdida de empleo de muchos profesores y la frustración de muchos estudiantes de Magisterio que no tendrán oportunidad de ejercer su profesión”.
