Sancho: “Sería un error garrafal oponerse al ascensor del Castillo de Dénia, porque se trata de un proyecto que permitirá una fácil accesibilidad a todo el mundo”
Para Sancho sería “un error garrafal” por parte de quien denegue el proyecto o por parte del que se oponga, porque en su opinión “se trata de un elemento que cambiará la fisonomía del castillo en un futuro porque permitirá a todo el mundo una fácil accesibilidad, de una forma rápida”.
Asimismo, permitirá triplicar como mínimo el número de visitas que se realizan al castillo actualmente, permitirá que este monumento se abrá al mediodía y conjuntamente con la cafetería que se está construyendo “creará una dinámica muy distinta a la que tenemos y hemos tenido hasta ahora, como es que tenemos un castillo que parece una montaña alejada de la población, y con el ascensor lo que haremos será acercar un monumento histórico y cultural a la gente facilitando el acceso” y por supuesto a toda la gente discapacitada o con escasa mobilidad, ya que “le abriremos la puerta a un mundo que hasta ahora le estaba casi prohibido, como era acceder al castillo de Dénia, por lo menos con cierta dificultad”.
El ascensor del Castillo es un proyecto que en cualquier caso en el futuro “puede ser mejorado, ampliado de una forma respetuosa con el medio ambiente”, explica el concejal de Cultura. Es un proyecto que “no afecta para nada a la estructura del castillo”, porque se ha tenido muy en cuenta que la estructura no vaya agarrada a la pared del castillo, por lo que “no afecta en nada al monumento”, que es Bien de Interés Cultural (BIC) desde 1989.
Asimismo, la plataforma de la parte superior del castillo “va sobre la muralla”, por lo que “tampoco afecta a la muralla”. En definitiva, “es estrictamente escrupuloso en la conservación del castillo”, manifiesta Juan Sancho quien añade que se ha tratado de hacer una estructura que “no tenga gran impacto visual”, que fuera ligera, un ascensor completamente al aire, panorámico y que turísticamente “puede ser una herramienta muy importante para triplicar más el número de visitantes al castillo y desestacionalizar el turismo de la ciudad”.
Por último ha recordado que el Castillo necesita cada año “una inversión continua”, porque no se puede tener un castillo “abandonado durante veinte años y de repente hacer una inversión mínima y estar veinte años más paralizado”.