Cullera aprueba la celebración de consultas ciudadanas
Caminar hacia una democracia más participativa y real. Es el objetivo del nuevo reglamento de Participación Ciudadana, propuesto por el gobierno de Cullera y aprobado ayer por unanimidad de todos los grupos que conforman el pleno. Es la primera vez en la historia del municipio que se regula la implicación de los vecinos en la vida política, más allá del derecho a voto cada cuatro años.
La iniciativa institucionaliza como novedad principal la celebración de consultas ciudadanas. Así, el consistorio podrá plantear cuestiones de relevancia dentro del ámbito competencial municipal para que los vecinos se pronuncien en las urnas.
De esta forma, la alcaldía, con el acuerdo previo de la mayoría absoluta del pleno y en conformidad con la normativa legal que corresponda en cada caso, puede someter a consulta popular los asuntos de la competencia propia municipal y de carácter local con la excepción de los relativos a la hacienda local.
La concejala de Participación Ciudadana, Laura Simó, ha asegurado que este paso supone «un salto cualitativo para conseguir una democracia real, una demanda que reclama la sociedad actual y a la cual hemos querido dar respuesta».
También podrá solicitarse la realización de consulta popular por iniciativa ciudadana. Hará falta la recogida de más de 1.000 firmas de apoyo entre el vecindario de Cullera y en conformidad con el que prevé la legislación vigente.
Iniciativas populares
El reglamento también abre la posibilidad a que sea la misma ciudadanía la que impulse iniciativas populares. Un número mínimo de 500 vecinos inscritos en el censo electoral podrán registrar propuestas de acuerdo, actuaciones o proyectos de reglamento en materia de la competencia municipal.
Cuando la propuesta se refiera a un asunto de competencia plenaria, incorporará un portavoz ciudadano que podrá intervenir en su defensa y explicación. El presidente autorizará y moderará llegado el momento la intervención de éste. Después de su intervención, la corporación debatirá y votará el asunto. Actualmente, los vecinos ya pueden intervenir en el pleno al final de cada sesión sobre los puntos tratados en ésta.
Simó ha explicado que la legislación estatal permite este tipo de iniciativas, pero establece un mínimo del 10 % del censo. «En el caso de Cullera hemos rebajado ese porcentaje al 2 % para facilitar que estas acciones puedan llevarse a cabo», subraya.
Asimismo, el reglamento institucionaliza lo que ya es una realidad en Cullera desde este mandato: la celebración de una asamblea ciudadana periódica para dar cuenta de la gestión. Periódicamente, el consistorio estará obligado a llevar a cabo este encuentro vecinal, donde se informará de la gestión realizada. Lo convocará y presidirá el alcalde.
Presupuestos participativos
Además, el reglamento consagra los presupuestos participativos. Al respecto, el Ayuntamiento tendrá en cuenta las iniciativas ciudadanas aprobadas y procurará que dispongan de dotación presupuestaria suficiente para poder realizarse, si corresponde.
Durante el último año, el Ayuntamiento de Cullera ya ha impulsado varias iniciativas para conseguir una democracia más participativa. Así, el Consell de Turisme se ha convertido en un organismo anchamente participativo con representación de los distintos sectores implicados en esta industria, cuyas decisiones se tienen en consideración a la hora de diseñar la política turística local.
El alcalde también ha celebrado la primera asamblea ciudadana para informar sobre el primer año de gestión y recoger nuevas iniciativas. Las visitas a barrios para hacer asambleas vecinales han formado parte de la agenda política y se han impulsado herramientas de participación como por ejemplo la app 'Cullera online'.
