Los responsables de “Un mundo teñido de paz” entregan al alcalde un dibujo conmemorativo del proyecto
El Alcalde ha recibido el obsequio que representa el trabajo con más de 50.000 niños y niñas
“Un mundo teñido de paz” es un programa pedagógico, itinerante, intercultural e internacional que pretende fomentar la educación para la paz a través de la expresión plástica. Este programa es fruto del trabajo de cuatro pedagogos: Abarca Obregón Gloria (México), Bahajin Said (Marruecos), Baltasar Verónica (México) y Bienvenida Sánchez Alba (España), que se han formado dentro del Master de la Paz que se desarrolla en Castellón con la colaboración de la Universidad Jaume I, la Fundación Bancaja y en el que el Ayuntamiento de Castellón también colabora.
Alberto Fabra ha destacado la importancia de este premio puesto que representa la voluntad de las personas de querer cambiar el mundo desde una perspectiva pacífica y constructiva. Castellón ha sido siempre una ciudad que se ha caracterizado por su humanidad y su solidaridad. Ahora este sentimiento se plasma también en la iniciativa de premiar y destacar a aquellas personas que dejan su vida en proyectos que llegan donde los gobiernos y las instituciones internacionales no llegan. Directamente a las personas, directamente a los niños y niñas que están aprendiendo que podemos hacer un mundo más justo e igualitario”
"Un Mundo Teñido de Paz" es un proyecto basado en la educación de valores permanentes, que ayude a vivir y convivir en paz a través del compromiso de la tarea de educar. Desde su lanzamiento en el año 2000, en “Un mundo teñido de paz” han participado once países, 290 colegios, 575 profesores y 55.500 alumnos, a sí mismo, ha movilizado a medios de comunicación, diplomáticos, y organizaciones Internacionales como la UNESCO y UNICEF.
Alberto Fabra ha alabado la acción de esta organización no gubernamental cuyos objetivos son “tan loables como la promoción de una cultura de paz, empezando por los niños y las niñas. Y el fomento del desarrollo sostenible que permita vivir y convivir en paz. Es un proyecto que desde Castellón creemos imprescindible y también en su desarrollo en nuestra ciudad, donde ya trabajamos en la concienciación de los niños y niñas castellonenses sobre la situación real de desigualdad en el mundo a través de los programas de sensibilización Otro mundo es posible, donde cada año, miles de escolares comprueban gracias a las ONGs, que ellos, desde nuestro país también pueden colaborar a crear un mundo más justo”.