Rafael Rodríguez Tranche califica de «triunfalista» el supuesto éxito del cine español en 2014
Rafael Rodríguez Tranche, profesor de Comunicación Audiovisual de la Universidad Complutense de Madrid, ha calificado de «triunfalista» el supuesto éxito del cine español en 2014 y ha puesto de manifiesto la alarmante pérdida de hábitos culturales y la asociación del cine a los productos de consumo en el curso de verano «El cine español, al encuentro de los espectadores».
Rodríguez Tranche ha iniciado su intervención explicando que la palabra crisis se asocia al cine español casi de forma intemporal. «Hay diversas razones que alimentan esta idea de crisis constante como la dificultad para acceder a las salas, la escasez de fondos para producir así como una legislación proteccionista y esto ha producido el efecto de que el cine español es un sector frágil que hay que proteger y cuidar lo cual ha generado un desapego del público» ha apuntado. Además, ha añadido que desde el punto de vista patrimonial todavía se agudiza más puesto que no hay una política activa de revalorización de los fondos cinematográficos.
En este contexto, el profesor de la Complutense ha analizado el calificativo de mejor año para el cine español atribuido al 2014 en cuanto a cuota de pantalla y recaudación. Al respecto, ha remarcado que tan solo unas pocas películas han acaparado el grueso en taquilla, concretamente el 80% de la recaudación correspondía a las 10 primeras películas. «La cuota de pantalla de 2014 fue de un 24% frente al 15% habitual y los 125 millones de euros de recaudación han hecho que se dé una visión triunfalista pero si descartamos la película Ocho apellidos vascos las cifras son casi como las de 2013 que se consideró un año terrorífico. Simplemente se han maquillado unos datos que siguen siendo estables» ha apuntado. En este sentido, ha señalado que Ocho apellidos vascos ha sido un éxito pero también se puede calificar de fracaso porque se repite la fórmula de acaparar la atención sobre un producto.
Así, ha añadido que el 63% de las películas estrenadas tuvieron una recaudación de menos de 100.000 euros y una presencia en salas testimonial. Al respecto, ha señalado que «si se analizaran a fondo estos datos sí que se daría un diagnóstico real. Uno de los hechos que se evidencia es la desaparición de un sistema de producción español que tenga un presupuesto holgado para hacer una película con medios».
En cuanto a la exhibición limitada del cine español en salas, el profesor de la Complutense ha explicado que solamente hay una mayor incidencia en aquellos cines que tienen más de seis salas. «El modelo de exhibición actual se controla desde las multisalas asociadas a centros comerciales donde el cine es un modelo de consumo más. El cine pasa por el hábito de consumo» ha apuntado. En este sentido, ha hecho referencia a que se ha separado la sala de cine de su contexto cultural y se ha perdido el cine como experiencia social compartida y elemento de barrio. «La desaparición de los cines de los centros históricos de las ciudades me parece una tragedia y una pérdida irreparable» ha afirmado.
En esta línea, Rodríguez Tranche ha señalado que se ha producido una pérdida en los hábitos culturales de la sociedad española. «Se están perdiendo hábitos como ir al cine y lo que ocurre con el cine es parte de una sintomatología general. Hay un acceso a la cultura que se está perdiendo, se está produciendo una desconexión entre algunas capas de la población y la cultura» ha apuntado.
