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La Policía Nacional detiene a una familia por vender teléfonos que pertenecían a compañías telefónicas

  • Los compraban con contratos para que les saliera el terminal gratis, y luego los vendían

  • Los agentes rastrean exhaustivamente todas las transacciones relacionadas con los teléfonos móviles, ya que cada vez son más y más variadas las estafas relacionadas con éstos dado su elevado coste

La Policía Nacional ha detenido a tres miembros de una familia, como presuntos autores de un delito de estafa, tras dar de alta teléfonos móviles con tarifas elevadas, para que el coste de estos fuera asumido por la empresa, y luego los vendían.

Los agentes dedicados a la investigación de los delitos contra la propiedad, ante el aumento de los robos, hurtos y estafas relacionadas con los teléfonos móviles, realizan un control exhaustivo de los canales de distribución de éstos en el mercado de segunda mano.

Aumento de la venta de teléfonos nuevos

Con estas averiguaciones, los agentes detectaron que últimamente se comercializan una gran cantidad de teléfonos móviles completamente nuevos, sin haber sido nunca utilizados, y que los compradores pagan por ellos precios elevados, superando en algunos casos los 500 euros.

La investigación destapó que estos teléfonos procedían de contratos con empresas de telefonía, en los que el “cliente” se da de alta con costosas tarifas, para que así el coste del terminal lo asuma la empresa, y acto seguido, buscan a un intermediario que es quien revende este teléfono, para evitar así que se les relacione con las altas fraudulentas.

Uno daba de alta el teléfono y otro lo vendía

Así mismo se detectó que un hombre, español de 36 años de edad, había vendido varios teléfonos de última generación, llegando a obtener un beneficio de 1780 euros, al mismo tiempo, su padre, un español de 53 años de edad vecino de Almazora vendía otro terminal por 370 euros. Así mismo, su mujer de 53 años de edad, habría vendido otros dos teléfonos recibiendo 380 euros.

Estos teléfonos habían sido dados de alta por la madre y el hijo, adeudando ya a la empresa más de 1200 euros por el impago de las facturas.

Ante estos hechos, los agentes detuvieron a estas tres personas como presuntas autoras de un delito de estafa.

Sobre estos hechos hay más líneas de investigación abiertas y no se descartan nuevas detenciones.

Los tres detenidos cuentan con antecedentes policiales y han sido puestos a disposición de la Autoridad Judicial.

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