Grau cuestiona que Castelló pague 3.000 euros por ser patrono de una fundación pública que organiza fiestas de Halloween

El portavoz adjunto del grupo municipal socialista, Pep Grau, cuestiona que el Ayuntamiento de Castellón pague 3.000 euros anuales por ser patrono de una fundación pública que “no solo no promueve actuaciones relevantes en Castellón, sino que además dedica fondos públicos a organizar fiestas de Halloween”.

Grau reclamó información en la última Comisión de Servicios a la Ciudadanía por las obras, servicios e inversiones proyectadas por la Fundació Jaume II el Just en la ciudad de Castellón. “El Ayuntamiento de Castellón debe velar por el destino adecuado del dinero público y no es de recibo que se destine el dinero de nuestros impuestos a una organización que lo dilapida con tanta impunidad”, afirma.

La Fundació Jaume II el Just, entidad pública de la Generalitat Valenciana, ha organizado para el domingo, 4 de noviembre, una fiesta de Halloween en el monasterio de Santa Maria de la Valldigna, en Simat, el mismo recinto que el Estatut d’Autonomia, tras la última reforma, consagra como “templo espiritual de todos los valencianos”.

La Valldigna acogerá la fiesta ‘Un fantasma al monestir‘, “donde los participantes disfrutarán del monasterio de la mano de un peculiar fantasma con una historia muy curiosa”, según la información divulgada por la fundación. Los niños que acudan disfrazados recibirán “un fantasmagórico regalo que no olvidarán”.

Grau ya alertó hace cuatro años sobre la dudosa rentabilidad de formar parte de la entidad y llegó a solicitar al equipo de gobierno la paralización de la subvención municipal. El edil socialista alertó al PP de la grave crisis económica en la que se encuentra la institución a causa de los "dispendios" y "desmesuras" de la gestión del entonces máximo responsable, un amigo del ex presidente Camps. La fundación había acumulado un agujero de 9 millones de euros, lo que obligó a la Conselleria de Cultura a aplicar un plan de choque para frenar el endeudamiento y transferir una partida millonaria para disminuir el déficit contable.